Policía fue asesinado en Antioquia: lo persiguieron hasta una casa y lo acribillaron

Jorge Luis García Meza, un patrullero de 39 años, fue asesinado en la noche de este sábado 19 de abril en el municipio de Chigorodó, en el departamento de Antioquia. Fue el segundo uniformado al que le quitaron la vida en el país durante este día.

El hombre hacía parte del grupo antinarcóticos de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín), en el Departamento de Policía de Urabá (Deura).

De acuerdo con lo que se ha conocido hasta ahora, García Meza, quien no vestía uniforme en ese momento, se desplazaba por las calles del casco urbano del mencionado municipio. En medio de su trayecto, comenzó a ser perseguido por sujetos que estaban armados.

Al percatarse de esto, el patrullero comenzó a correr por diferentes cuadras con el objetivo de salvar su vida. Detrás de él venían sus futuros asesinos.

La situación generó el desespero del patrullero, por lo que la única opción que encontró fue golpear en las casas por las que pasaba para intentar obtener refugio y escapar de los criminales.

Tras varios intentos, finalmente le abrieron la puerta en una de las residencias, pero esto no fue suficiente. Los delincuentes se percataron de todo, ingresaron al inmueble y allí lo acribillaron.

Después de acabar con la vida del integrante de la Sijín, los asesinos emprendieron la huida por las calles del sector, mientras que los vecinos de la zona se percataron de lo ocurrido tras escuchar los disparos y dieron aviso a las autoridades.

Hasta el sitio llegó el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y realizó el respectivo levantamiento del cadáver. Además, iniciaron las primeras pesquisas para saber qué ocurrió.

Jorge Luis García Meza era conocido por sus amigos como Chicho, quienes lo describen como una buena persona.

En cuanto a su trabajo, se ha conocido que llevaba varios años en la lucha contra las drogas, participaba en operativos de alto riesgo en contra de estructuras dedicadas al narcotráfico y que tienen presencia en la región de Urabá.

Hasta el momento se desconocen por completo los motivos por los que se perpetró el violento ataque, por lo que las autoridades ya se encuentran al frente del caso intentando dar con el paradero de los responsables.

Este es el segundo miembro de la Policía que es asesinado este Sábado Santo, el otro caso ocurrió en el municipio de Lourdes, en el departamento de Norte de Santander. Allí, hombre armados mataron al patrullero Andrés David Padilla Mejía, de 28 años.

De acuerdo con las primeras informaciones, el uniformado se encontraba prestando seguridad en medio de la procesión que se realizaba, cuando hombres en motocicleta le dispararon sin mediar palabra.

El patrullero fue traslado rápidamente hasta un centro médico, donde finalmente se confirmó su muerte. Las autoridades ofrecieron una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que permita esclarecer el crimen.