Katerine Andrea Martínez, la modelo webcam implicada en el atentado al senador Miguel Uribe, busca acuerdo con la Fiscalía

Cada día que pasa se va armando un poco más el rompecabezas en medio de la compleja investigación por el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, registrado en la tarde del 7 de junio, cuando se encontraba dando un discurso político en el parque El Golfito, en el occidente de Bogotá.

SEMANA revela detalles inéditos de la audiencia de imputación de cargos en contra de Katerine Andrea Martínez, alias Gabriela, la modelo webcam que —según la Fiscalía General— participó activamente en la logística del atentado contra el dirigente político del Centro Democrático.

Las pruebas documentales y testimoniales recolectadas permitieron establecer la forma en que se planeó y ejecutó la acción, junto a otras tres personas que ya fueron plenamente identificadas.

“A través de los diferentes elementos materiales probatorios recolectados se tiene que el señor Helber José Arteaga Hernández ejecutó un plan criminal dispuesto para lograr el asesinato de Miguel Uribe Turbay, senador en ejercicio de sus funciones, utilizando para tal efecto un arma de fuego marca Glock color negro sin contar con permiso de autoridad”, precisó la fiscal seccional.

Para la logística del plan criminal se utilizaron motocicletas y vehículos particulares, con el fin de llevar el arma y al menor de edad que había sido contratado para que le disparara al senador mientras se encontraba en el evento público.

“Arteaga Hernández, con el mencionado propósito, contactó a varias personas, entre ellas un menor de edad, a Carlos Eduardo Mora González y a usted, Katerine Andrea Martínez, quienes aceptaron participar en el mencionado atentado”, aclaró la fiscal.

Las pesquisas indican que serían siete las personas vinculadas a la logística del atentado. “Se realizó una distribución del trabajo criminal en el que Arteaga Hernández se ocupa de asignar los roles y las actividades por desarrollar. Tanto así que el día 5 de junio designa a Carlos Eduardo Mora González como el encargado de conducir el vehículo (…) utilizado como instrumento para reconocer el lugar donde se cometería el hecho".

Este vehículo iba a ser usado para garantizar la huida del sector de todos los partícipes e intervinientes “posterior al homicidio”. Con esto, queda claro que el plan tenía como finalidad acabar en el acto con la vida del precandidato presidencial.

El “jefe del plan” le había ofrecido a alias Gabriela una suma de cinco millones de pesos cuando terminara “la vuelta”. La joven de 19 años tenía la misión de entregarle el arma de fuego al adolescente que había sido contratado para atentar contra Uribe Turbay.

Después, la joven tenía que ir hasta el parque El Golfito para realizar labores de vigilancia junto a dos de sus compañeros y verificar que el joven sicario cumpliera lo prometido.

En medio de la audiencia, la abogada de alias Gabriela interrumpió a la fiscal para manifestarle que su cliente tenía el deseo de colaborar con las autoridades y dar información en esta investigación.

“Mi defendida, su señoría, teniendo en cuenta que se trata de este caso de relevancia, que interesa tanto a los derechos prioritarios de las víctimas a buscar la verdad, se encuentra realizando una colaboración con la justicia”, precisó la jurista.

En los próximos días se conocerá si se llega a un acuerdo entre las dos partes. Esto se sumaría a la colaboración que entregaría el joven sicario, que permanece en el búnker de la Fiscalía bajo estrictas medidas de protección.

Una de las líneas de investigación más complejas está dirigida a identificar al “man de la olla”, el hombre que —según lo dijo el mismo adolescente al momento de su detención y en su interrogatorio— fue la persona que lo contactó para ejecutar este crimen.

En su declaración, conocida por SEMANA, el adolescente aseguró que se trataba de una persona muy poderosa en la localidad de Fontibón, que maneja el negocio del microtráfico y otras redes criminales.