Bogotá
“Experimenté mucho miedo”: conductora del SITP contó cómo fue agredida por hombre que manejaba vehículo de alta gama
La trabajadora del sistema de transporte público habló desde la Clínica Cardiovascular de Soacha.
La intolerancia contra los conductores de buses del servicio público continúa siendo pan de cada día en Bogotá. Este 28 de julio, una conductora fue víctima de agresión verbal y física por parte del propietario de un vehículo particular.
La conductora, que reservó su nombre por seguridad, trabaja con La Rolita, el primer operador público del Sistema Integrado de Transporte de Bogotá.
Según el operador, la mujer conducía la ruta H-635 cuando fue sorprendida por el conductor de un vehículo Audi de placas EWW-252, color gris, que no solo la cerró para agredirla verbalmente, sino que abordó la cabina para ultrajarla.
“La Rolita rechaza los actos de violencia que se presentaron hoy hacia las 10:30 de la mañana frente a la estación de Madalena, tras el ataque físico y verbal del que fue víctima una operadora de La Rolita, que se encuentra en este momento en la Clínica Cardiovascular de Soacha”, dijo el operador en un comunicado a la opinión pública.
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La trabajadora conducía la ruta H-635 cuando fue sorprendida por el conductor en mención, que la cerró en tres ocasiones durante el trayecto. “Experimenté mucho miedo. Me daba angustia que estrellara el bus y que algún pasajero resultara afectado”, dijo la operadora del bus de La Rolita.
El ciudadano, de aproximadamente 35 años, se bajó de su vehículo, golpeó la ventana del bus, la tomó por la camisa y la haló tan fuerte que le rompió el uniforme y le dejó lesiones en el brazo izquierdo, como lo evidencia la valoración médica.
Ante estos hechos, la gerente de La Rolita, Carolina Martínez Cuéllar, hizo un llamado al respeto y a la tolerancia en la vía. “Nada justifica la agresión contra las personas que están prestando el servicio de transporte público y mucho menos hacia las mujeres”, dijo.
La alcaldesa se había reunido con un conductor agredido
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, se reunió días atrás con Édison, un conductor de SITP que fue apuñalado por no realizar una parada, debido a que el bus que manejaba iba con sobrecupo. Lo paradójico fue que lo hizo dos días después de haber cuestionado a los conductores de este sistema de transporte por su actitud para impedir los colados.
“Nos vimos con Édison el conductor del SITP agredido anoche en un acto de intolerancia de una pareja por pedirles bajarse para evitar sobrecupo. Gracias, Édison, por tu buena energía a pesar del desafortunado hecho. Cuenta con nosotros. Pronta recuperación y regreso a tu labor. Gracias por lo que tú y tus compañeros hacen a diario para transportar y cuidar a los bogotanos”, dijo la mandataria al conductor, con quien subió una foto.
Su comentario fue reprochado por algunos ciudadanos en redes sociales, dado el “regaño” que les había pegado a conductores como Édison, atribuyéndoles parte de la culpa de los colados en el sistema de transporte.
“Robar a quienes sí pagan el pasaje e impuestos es abuso, falta de cultura ciudadana y contravención. Pero la actitud de me importa cero del conductor y del operador privado es la razón por la que vamos a renegociar esos contratos”, había comentado la alcaldesa.
En cuanto a Édison, el conductor, por fortuna no tuvo heridas graves. Eso sí, las agresiones que sufrió no fueron cualquier cosa.
“En el sector de Molinos llevaba el bus demasiado lleno, iba con sobrecupo. Me hicieron una parada y decidimos no pararle al señor porque no le cabía más gente. Al ver que yo no le quise abrir la puerta, comenzó a agredirme, a agredir el bus, a agredirme por el lado mío del conducto con un cuchillo”, narró.