Nación
El “tumbe” que se inventó un funcionario de un juzgado para robarse los títulos valores del despacho
Se trata del escribiente en un juzgado de Cundinamarca, al parecer, autorizó a un tercero para cobrar los títulos valores.

Un funcionario de un despacho judicial recibió, por encargo, coordinar las comunicaciones con los bancos para pagar los dineros comprometidos en los títulos valores que estaban en el juzgado. Ese encargo lo convirtió en negocio y así, con la ayuda de un amigo, ordenó los pagos en al menos ocho procesos.
El funcionario fue identificado como Wilson Cipagauta Bernal, era el escribiente de un juzgado en el municipio de Sibaté, en Cundinamarca. La Fiscalía investigó y logró establecer que en ocho procesos, el escribiente ordenó los pagos y un tercero los reclamó en el banco.

“La Fiscalía General de la Nación obtuvo elementos materiales probatorios que dan cuenta de las actuaciones irregulares desplegadas presuntamente por Wilson Cipagauta Bernal, un exfuncionario de un juzgado civil de Sibaté (Cundinamarca) que se aprovechó de su cargo de escribiente y se apropió de los recursos de 82 títulos valores”, señaló la Fiscalía.
El monto de lo apropiado, de acuerdo con la investigación de la Fiscalía, llegó a los 62 millones de pesos, retirados por su amigo en el bando pero con la autorización que él mismo firmaba, como responsable de definir qué títulos valor y a quién se pagaban. El negocio resultó sencillo, pero corrupto.
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“Cipagauta Bernal, al parecer, aprovechó dicho encargo y autorizó a un conocido para que cobrara 62 millones de pesos en una entidad bancaria y se los entregara a través de diferentes transacciones electrónicas. De esta manera se quedó con 59 millones de pesos entre el 7 julio y el 8 de octubre de 2021, y el resto se lo dejó al tercero en contraprestación por realizar los retiros”, advirtió el ente acusador.
La Fiscalía adelantó por varios meses las investigaciones y recaudó todos los elementos de prueba, que incluyeron los soportes bancarios con las consignaciones y la autorización para reclamar los títulos valores que, irónicamente estaban a nombre de la misma persona, un amigo del funcionario del despacho judicial.
“Por estos hechos, un fiscal delegado ante tribunal de la Seccional Cundinamarca imputó al exfuncionario los delitos de hurto agravado en masa y falsedad ideológica en documento público”, dijo la Fiscalía tras completar las audiencias preliminares de imputación de cargos y medida de aseguramiento.

El funcionario aceptó, de manera libre y voluntaria los cargos; por disposición de un juez de control de garantías deberá cumplir medida de aseguramiento privativa de la libertad en su lugar de residencia.