El Inpec entregó detalles del traslado de alias Pipe Tuluá, antes de su extradición a los Estados Unidos

Alias Pipe Tuluá se convirtió en una “papa caliente” para el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) y mantenerlo recluido en las cárceles es una amenaza de muerte para los funcionarios de la entidad ahora, cuando se conoció que la justicia de los Estados Unidos lo busca por el delito de narcotráfico, el problema pasó a la Policía.

En la mañana de este miércoles, se conoció que alias Pipe Tuluá fue trasladado de la cárcel La Picota, una de las más seguras del país, a una estación de Policía en el centro de la capital, en la localidad de los Mártires, donde han estado otros delincuentes como alias Otoniel y, recientemente, el extraditado narcotraficante Carlos Lehder.

El director del Inpec, el coronel Daniel Gutiérrez, explicó que fue por una solicitud de la Policía que se concretó el traslado de alias Pipe Tuluá de la cárcel La Picota, a la estación de Los Mártires, mientras se completa el trámite para su extradición a los Estados Unidos y por el delito de narcotráfico.

“Solicitaron el traslado para una estación de Policía donde cumple todos los requisitos de infraestructura, como la seguridad. Hay varias personas privadas de la libertad que se encuentran en estaciones de policía y guarniciones militares, en este caso se hizo la solicitud para que estuviera allí bajo control y vigilancia de la Policía”, explicó el director del Inpec.

El director advirtió que una vez se cumplió con el traslado, bajo las estrictas medidas de seguridad que corresponden, los delincuentes sumados a alias Pipe Tuluá lanzaron nuevas amenazas en contra de los funcionarios del Inpec, aún cuando quienes tienen su custodia en este momento es la Policía.

“Lo que generó, después de esto, unos panfletos amenazantes donde amenazan, declarando objetivo militar a los funcionarios penitenciarios del país. No obstante, en un trabajo articulado con la Policía y el Ministerio de Defensa se han hecho revistas constantes a los establecimientos”, dijo el directivo.

Alias Pipe Tuluá tiene varios procesos en su contra en Colombia, además de condenas. En algún momento, se proyectó como una figura representativa para concretar mesas de diálogo entre el gobierno del presidente Petro y grupos criminales urbanos en diferentes regiones. Esa connotación lo convirtió en un cacique en la cárcel, sin embargo, ni él, ni el gobierno cumplieron.

“No es una estación de Policía normal porque para tener personas privadas de la libertad en guarniciones militares o estaciones de Policía, se hace un estudio técnico a través de la revisión de la infraestructura de la seguridad penitenciaria y de los programas de atención y tratamiento para poder resolver y establecer la rigurosidad del espacio”, señaló el coronel.