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El escuadrón secreto de las Fuerzas Militares que busca a Iván Mordisco de las disidencias de las Farc
SEMANA conoció en exclusiva cómo actúa el equipo élite que está detrás de estos objetivos de alto valor en el suroccidente de Colombia.
Como si fueran fantasmas. Así se desplaza un grupo élite de las Fuerzas Militares en varias zonas del sur de Colombia, donde opera Néstor Gregorio Vera Fernández, conocido como Iván Mordisco, uno de los líderes más destacados de las disidencias de las Farc, junto a sus hombres más cercanos. Este equipo especial está formado por hombres y mujeres seleccionados con mucho cuidado, provenientes de las mejores filas del Ejército, la Armada, la Policía Nacional y la Fuerza Aeroespacial Colombiana.
La selección de este personal fue rigurosa. No solo se requería valentía, sino que los candidatos debían demostrar una excelencia física, psicológica, técnica y táctica. Cada miembro tiene un historial operativo claro y una experiencia comprobada en misiones contra objetivos de alto valor, como los capos del Clan del Golfo, mandos intermedios de las disidencias de las Farc y líderes de redes transnacionales dedicadas al narcotráfico.
Durante el proceso de selección, se llevaron a cabo pruebas de combate cuerpo a cuerpo, manejo de armamento de última generación, toma de decisiones bajo presión, resolución de conflictos y adaptación al estrés extremo, todo esto en escenarios de diferentes pisos térmicos: desde el calor sofocante del Caquetá hasta la humedad impenetrable del Chocó y el frío cortante del páramo de Sumapaz.
Oficiales del Ejército de Estados Unidos participaron en parte del entrenamiento. Su rol no fue solo simbólico. Algunos de los actuales miembros del grupo fueron formados en territorio estadounidense, mientras que otros lo hicieron aquí, en Colombia, bajo estrictos acuerdos de cooperación en materia de seguridad. El estándar es uno solo: operaciones milimétricas sin margen de error.
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Según información que ha llegado a este medio, los integrantes de este grupo operan en células móviles distribuidas en cuatro puntos secretos del sur del país. Pueden activar el equipo en cuestión de minutos y moverse con velocidad táctica.
Cerca de Mordisco
SEMANA conoció mediante fuentes de la inteligencia militar que el grupo élite de uniformados ha estado muy cerca de su objetivo, pero este ha escapado por la destreza que tiene al moverse por la zona.
“Las operaciones se mantienen durante los siete días de la semana y la inteligencia militar no descansa para poder ubicar al objetivo. Incluso, gente cercana a Mordisco ha empezado a entregar información sobre por dónde se mueve, con quién anda y son datos muy precisos que nos sirven para poder dar con su paradero”, explicó la fuente consultada por SEMANA.
Además, afirma que los integrantes de este grupo tienen una consigna clara: regresar con la misión cumplida, sin importar el costo.
“Nuestros hombres y mujeres saben que la meta es clara y es poder ubicar a Mordisco. La misión es poder llevarlo ante la justicia para que pague por todos los delitos por los que lo acusan, y en esto trabajamos”, agregó.
Mientras las operaciones militares avanzan, las familias de los experimentados uniformados de este equipo los esperan en casa, anhelando esos días de descanso o permisos que se les conceden tras cumplir con misiones dirigidas a alcanzar grandes objetivos.
