Coronavirus

Coronavirus | El HUS afronta el tercer pico sin reservas de sangre y desabastecimiento de medicamentos

Carlos Ibarra, subgerente de servicios médicos del Hospital Universitario de Santander, cree que el levantamiento de medidas puede empeorar la crisis de la pandemia en el departamento.

14 de junio de 2021
Las UCI del Hospital Universitario de Santander están al tope. Por eso se insiste en el llamado a la ciudadanía para que practique el autocuidado.
Las UCI del Hospital Universitario de Santander están al tope. Por eso se insiste en el llamado a la ciudadanía para que practique el autocuidado. | Foto: UCI en HUS Bucaramanga

En el Hospital Universitario de Santander (HUS) las campanas de alarma por la covid-19 están sonando desde hace muchos días, pues ha sido el generador del efecto dominó de una cantidad de dificultades. Las 67 camas de unidades de cuidados intensivos han estado ocupadas en los últimos días. La escasez de medicamentos, las bajas reservas de sangre y la constante llegada de pacientes con diversas patologías tienen a todos en aprietos y con la frustración a flor de piel. El personal médico no sabe cómo actuar frente a lo que viven.

Por eso, Carlos Eduardo Ibarra Rolón, subgerente de servicios médicos del HUS, considera que las medidas de apertura que benefician la economía son un golpe bajo para ellos. “Las medidas de apertura empeoran las crisis. Creo que todas las sociedades científicas en una carta conjunta manifestaron su preocupación por la situación tan difícil que se iba a tener a partir de la protesta social y con todas las medidas eliminadas. Creo que vamos hacia una crisis muy grave”, comenta.

El HUS es referente para la región, por lo que llegan pacientes de Bolívar, Cesar, Norte de Santander y varios municipios de Santander, lo cual genera que la atención muestre un panorama de colapso, a lo que médicos, enfermeros y administrativos tratan de buscar soluciones.

“Nunca habíamos tenido tanta afluencia de pacientes como en este momento. Este es un momento en el que mejor hemos estado en infraestructura durante la pandemia, es el punto en el que tenemos todas las camas de UCI que planificamos. El hospital tenía 15 UCI antes de la pandemia y en este momento hay 67, pero ya no dan abasto para lo que estamos viviendo”, relata Ibarra Rolón.

El directivo recuerda que en Santander el tercer pico de la pandemia coincidió con el momento crítico de la protesta y por eso ha estado creciendo. Dice que “estamos en un periodo crítico y se levantan las restricciones; eso va a poner más crisis y más carga sobre el sistema. Creo que vamos a tener más enfermos, indudablemente. Así uno tenga medidas de protección, hay riesgo en la medida, ya que no hay restricciones para salir a sitios públicos y eso favorece que haya contagios”.

A esa preocupación se le suma el desabastecimiento de medicamentos que se vive en varios lugares del país como efecto del paro, lo que dificultó la llegada de medicinas y los insumos para elaborarlas, que hacen que el panorama se torne más oscuro. Y en el caso del HUS la angustia también cae sobre las reservas de sangre. Las unidades que logran conseguir solo sirven para atender el día a día.

“El Hemocentro gradualmente ha ido aumentando su capacidad de conseguir las unidades que se requieren. Tener más camas UCI y pacientes críticos demanda mayores transfusiones de sangre. Pero en este momento de pandemia, con tantas dificultades, ha sido difícil hacer las jornadas que habitualmente se realizan para contar con las unidades requeridas”, dice el médico.

“Estamos trabajando en el día a día. Todos los días se hacen jornadas, se recogen 30 o 40 unidades de sangre y esas son las de gastar al día siguiente. De reservas como tal estamos agotados”, agregó.

La situación los ha llevado a pedirles a todos los que llegan al hospital a que inviten a conocidos para que donen sangre y contar con las reservas suficientes en medio de la emergencia.