Nación
“Los cuerpos al río”: alias Andrey estaría detrás de una nueva guerra contra el ELN en Norte de Santander
Fuentes de la Fuerza Pública indicaron que el jefe de las disidencias de las Farc habría ordenado una ofensiva contra sus enemigos.
Hay preocupación en la región del Catatumbo por una nueva guerra que estaría iniciando entre las disidencias de las Farc de alias Andrey.
Fuentes de la Fuerza Pública confirmaron que la violencia se ha recrudecido hace varias semanas en zona rural de Tibú y La Gabarra, en Norte de Santander.
Lo que ha identificado la Fuerza Pública es que detrás de la nueva guerra entre el ELN y las disidencias de las Farc estaría alias Andrey, quien se encuentra en mesa de negociación con el Gobierno.
La nueva guerra entre las disidencias y el ELN habría dejado un número importante de bajas de lado y lado. Incluso, en las conversaciones obtenidas de la delincuencia, los analistas ubicaron una en la que alias Andrey estaría dando instrucciones a sus hombres de arrojar a los muertos a ríos.
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La situación está generando nuevamente preocupación entre pobladores y Fuerza Pública; esta última ha redoblado los esfuerzos para combatir a las estructuras criminales que delinquen en la zona de frontera entre Colombia y Venezuela.
La guerra entre el ELN y las disidencias de las Farc dejaron —iniciando 2025— más de 50.000 desplazados y más de cien muertos, siendo una de las peores crisis humanitarias de la historia reciente del país.
Según la Fuerza Pública, la guerra se desató por los negocios de minería ilegal y narcotráfico que existen en la zona y que se encuentran en disputa entre las dos organizaciones criminales.
Es de anotar que las disidencias de las Farc de alias Andrey, quien recibe órdenes de alias Calarcá, antiguo socio de Iván Mordisco, se encuentran en medio de un proceso de negociación con el Gobierno en Catatumbo, Norte de Santander.
Incluso, se anunció este año que dicha facción de las disidencias de las Farc se concentraría en una zona especial de Tibú, en Norte de Santander, para avanzar en una posible dejación de armas, sin que a la fecha se haya concretado.
Iván Mordisco y Calarcá llegaron juntos al proyecto de paz total del gobierno del presidente Gustavo Petro; sin embargo, tras las reiteradas acciones criminales de las disidencias de las Farc, el Gobierno se quedó negociando solo con los hombres de Calarcá, concretándose —además— una ruptura entre los dos jefes criminales.
Mordisco siguió por su cuenta y por fuera de la paz total, mientras que Calarcá se mantuvo en el llamado del Gobierno, pero aclarando que no ha dejado de delinquir.
