Nación
Álvaro Uribe se defiende: asegura que no propuso la acción de revisión en el caso Monsalve y niega dolo
El exmandatario da sus argumentos antes del fallo del 28 de julio. Denuncia un montaje con grabaciones ilegales y testigos manipulados, afirmando que solo pidió la verdad sin ofrecer beneficios.

El país está expectante del desenlace de uno de los procesos más relevantes en su historia reciente: el juicio contra Álvaro Uribe Vélez. Este caso, que incluyó 67 audiencias y la declaración de más de 100 testigos, interceptaciones telefónicas y análisis de pruebas documentales, está en su recta final y la decisión judicial se conocerá el próximo 28 de julio.
Mientras se llega a ese punto, el exmandatario inició una campaña en sus redes sociales para desmontar los puntos principales por los que se le acusa. En un extenso mensaje aclara los hechos, en especial los que se refieren a la acción de revisión, asegurando que no fue determinador, ni hubo dolo, ni esta fue presentada.
Inicia sosteniendo que la idea de presentar dicha acción en favor del testigo Juan Guillermo Monsalve fue del abogado Héctor Romero, defensor de Monsalve, y no de su entonces abogado Diego Cadena. Según Uribe, Romero explicó que Monsalve no podía acceder a la JEP por los delitos que cometió, por lo que se planteó dicha acción como alternativa. Aseguró además que Cadena no ofreció beneficios, no llevó declaraciones prescritas y solo sugirió, en tono informal, que Monsalve escribiera su disposición a decir la verdad ante la Corte.
Uribe denunció que Monsalve orquestó un montaje con ayuda de terceros para incriminarlo. Sostuvo que el 22 de febrero de 2018, Monsalve recibió a Cadena en la cárcel La Picota con un reloj grabadora ingresado de forma ilegal, y que al día siguiente ya se había interpuesto una denuncia en su contra por presunto soborno.
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Agregó que la magistrada Sandra Yepes actuó con inusual rapidez al recibir la declaración de Monsalve, y que posteriormente se entregó una USB con grabaciones supuestamente manipuladas. A pesar de ya haberlo denunciado, Monsalve habría seguido comunicándose con Cadena para sostener el engaño.

El expresidente Uribe defendió su actuación frente al testimonio de Monsalve, asegurando que nunca pidió una retractación, sino que este dijera la verdad, incluso si ello implicaba reconocer la presencia de paramilitares en la hacienda Guacharacas.
Indicó que su llamada a Juan Guillermo Villegas, interceptada y parte del expediente judicial, fue malinterpretada por la Fiscalía, ya que en ella no solicitó beneficios ni mencionó la palabra “retractación”, sino que insistió en conocer la verdad sin ofrecer contraprestaciones.
Uribe también relató que, tras esa llamada, el abogado Cadena le informó que Monsalve se mostró arrepentido de haber mentido y se comprometió a redactar, de su puño y letra, una nueva declaración. Posteriormente, Cadena le comunicó que dicha carta sería entregada por Deyanira Gómez, expareja de Monsalve, quien lo visitaría en prisión. Asimismo, reveló una interceptación entre Cadena y Enrique Pardo Hasche, compañero de celda de Monsalve, en la que se menciona que la carta estaba lista, sin referencias a Uribe.
El expresidente Álvaro Uribe Vélez se refirió de nuevo al juicio que acaba de terminar en su contra y habló de algunos aspectos relacionados con la acción de revisión: “Ni determinador, ni dolo, ni presentada”. https://t.co/if1kX8q65f pic.twitter.com/QHzZNqLCvB
— Revista Semana (@RevistaSemana) July 13, 2025
El 3 de abril de 2018, el abogado Cadena contactó al juez Carlos Alberto Cruz, su antiguo profesor, para manifestarle su preocupación por un posible entrampamiento, del cual Álvaro Uribe dice no tener conocimiento en ese momento. Durante la conversación, Cadena llamó a Uribe y puso el altavoz sin informarle que Cruz lo escuchaba. Uribe relata que Cadena reiteró que la carta de Juan Guillermo Monsalve estaba lista y le pidió reunirse brevemente en el Congreso.
Uribe, con premura y confiando en su abogado, autorizó a que procediera con lo que considerara apropiado. Cadena mencionó, sin haberlo consultado previamente, la posibilidad de una acción de revisión, a lo que Uribe respondió afirmativamente, sin prestar mucha atención porque estaba de afán e insistiendo en que siempre pidió la verdad y jamás beneficios. Subraya que en ningún momento buscó inducir falsedades y que sus respuestas fueron espontáneas, sin dolo ni premeditación.
Paralelamente, Deyanira Gómez avanzaba con lo que Uribe califica como una trampa. Le aseguró a Cadena que entregaría la carta al día siguiente, pero luego lo aplazó alegando que tenía una hija enferma. Aun así, ese mismo día acudió a la Corte Suprema con una nota manipulada en la que afirmaba que Monsalve había sido presionado.
Según Uribe, esto fue parte de una coordinación para grabar ilegalmente a Cadena, quien en esa conversación reiteró que solo se había pedido la verdad y que no hubo ofrecimientos. Más adelante, Uribe señala que, de haber sabido de ese encuentro con Deyanira, habría desaconsejado que se realizara. Afirma que todo fue un montaje planeado para hacer caer a Cadena, encarcelarlo y luego involucrarlo a él.
Simultáneamente, los dos hijos del expresidente, Tomás y Jerónimo Uribe usaron también sus redes sociales para defender a su padre. Primero fue Tomás, quien aseguró que el juicio contra Álvaro Uribe pone en riesgo la democracia y denunció persecución política y luego fue Jerónimo quien pidió recordar que Iván Cepeda “nunca fue investigado por sus vínculos con La Farc porque invalidaron los computadores de Raúl Reyes”, así como que alias ‘Tornillo’ “legisla con una curul regalada”. Remató con la afirmación de que “Timochenko, impune reclutador de niños, pide condenar a Álvaro Uribe”.