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Trump va por las farmacéuticas: amenaza con aranceles del 200 % y sacude la industria mundial
El presidente propone aranceles del 200 % a las farmacéuticas que no produzcan en Estados Unidos, generando alarma global por posibles desabastecimientos y alzas de precios.

El presidente Donald Trump volvió a encender las alarmas al advertir que impondría aranceles del 200 % sobre las importaciones farmacéuticas si las empresas no reubicaban su producción en Estados Unidos durante un plazo de entre un año y año y medio. Según medios oficiales de la Casa Blanca, la medida busca reducir la dependencia de países como India y China, reforzar la seguridad nacional y reactivar la industria local.
Expertos en finanzas y mercados han reaccionado con escepticismo. Analistas de Barclays y UBS señalan que la magnitud del impuesto podría ser altamente inflacionaria e impracticable debido a los complejos ciclos regulatorios y logísticos que implica relocalizar cadenas de producción complejas en tan poco tiempo.
Desde el punto de vista de los mercados, los índices europeos y asiáticos de farmacéuticas apenas registraron variación tras el anuncio, lo que sugiere que los inversores dudan de que Trump lleve a cabo la medida realmente.

En India, principal proveedor de genéricos al mercado estadounidense, la posible aplicación de un arancel del 200 % ha generado inquietud. El Times of India reportó que esto podría provocar una fuerte contracción de las exportaciones y desencadenar una escalada de precios de medicamentos esenciales en Estados Unidos.
En Australia, el gobierno y el Banco de la Reserva advirtieron sobre el impacto en empresas como CSL; el vicegobernador del banco central australio señaló que el episodio podría ejercer un “efecto profundo” en la economía global .
Académicos demuestran preocupación por los efectos en salud pública. Un informe de Johns Hopkins expone que el 72 % de los ingredientes activos entran a Estados Unidos desde el extranjero; imponer tasas elevadas podría elevar los precios y generar desabasto, sobre todo de genéricos indispensables para hospitales.
Stephen Colvill, del Duke‑Margolis Institute, advierte que la medida podría provocar interrupciones en los ensayos clínicos y discontinuaciones de medicamentos con bajo margen de ganancia

El economista Clifford Rossi, de la Universidad de Maryland, afirmó que el anuncio funciona como instrumento de “estrategia de negociación por intimidación”: las empresas se ven obligadas a evaluar riesgos con nueva perspectiva, aprovechando tecnologías como la manufactura continua, aunque muchas decisiones quedan en espera hasta medir el nivel real de amenaza.
Por su parte, Reuters en Breakingviews concluye que Trump utiliza un “martillo arancelario indiscriminado” para alcanzar objetivos muy diversos. Mientras el cobre y los fármacos necesitan herramientas específicas para relocalización, imponer el mismo método puede generar resultados contradictorios según el sector
Así mismo, este anuncio se inscribe en un contexto más amplio de tensiones comerciales. Estados Unidos ya ha aplicado gravámenes sobre cobre (50 %), aluminio, acero y automóviles, y acumula más de $24.000 M de dólares en ingresos arancelarios hasta mayo .
La Administración también impulsa iniciativas como la política de “nación más favorecida” para controlar precios domésticos, sin que haya aún mecanismos claros de implementación.
Aunque no existen garantías de que los aranceles terminen aplicándose tal cual fueron anunciados, sí intensifican un debate urgente sobre la dependencia de cadenas globales en medicamentos críticos y los posibles efectos adversos sobre la salud pública y la economía global.