Estados Unidos
Trump pierde la batalla en su camino al Nobel de la Paz: esta es la razón que lo dejó fuera del juego
Donald Trump perdió el respaldo ucraniano para el Nobel de la Paz.
La expectativa en torno a la nominación de Donald Trump al Premio Nobel de la Paz, impulsada por el congresista republicano Buddy Carter, venía creciendo desde hace semanas. Su labor como mediador en el cese al fuego entre Israel e Irán fue considerada destacable por algunos.
Incluso el gobierno paquistaní había propuesto su candidatura a principios de mayo, argumentando su intervención diplomática en conflictos geopolíticos relevantes.
Sin embargo, uno de los compromisos más importantes que asumió Trump al llegar nuevamente a la Casa Blanca fue resolver el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, vigente desde el 24 de febrero de 2022 y considerado el mayor enfrentamiento terrestre en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Pero esa promesa se ha quedado corta.
Y aunque Oleksandr Merezhko, jefe del comité de asuntos exteriores del Parlamento de Ucrania y reconocido legislador, había propuesto oficialmente la nominación de Trump en noviembre de 2024, el pasado lunes 23 de junio, decidió retirar su apoyo públicamente, informó el medio Newsweek.
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La razón es clara: la promesa del presidente Trump de resolver la guerra en 24 horas está lejos de haberse cumplido. Han pasado más de cinco meses desde su regreso a la Presidencia y los resultados tangibles en relación con el conflicto han sido prácticamente nulos.
Aunque Ucrania aceptó en marzo una propuesta enviada desde la Casa Blanca para abrir un nuevo canal de negociaciones, Rusia ha optado por el silencio.
El Kremlin no ha dado señales de querer comprometerse con el diálogo propuesto, lo que ha paralizado cualquier avance en el diseño de un tratado de paz.
A pesar de los esfuerzos por generar un acercamiento con Moscú, las gestiones diplomáticas del mandatario estadounidense han sido limitadas.
Merezhko incluso declaró, según Newsweek, que Trump “estaba evadiendo la necesidad de imponer sanciones reales a Rusia”, lo que debilita la postura de fuerza que Ucrania esperaba de su aliado occidental.
En un intento por presionar al Kremlin, el presidente Trump advirtió a principios de mayo que, si no se tomaban en serio las negociaciones, habría ligeros cambios en su manera de actuar.
Les dio un plazo de dos semanas para establecer comunicación con respecto a un nuevo proceso de diálogo, pero dicha advertencia tampoco generó una respuesta significativa.
La falta de avances concretos y la sensación de que su promesa de paz se ha desvanecido en discursos sin efecto llevaron a que Ucrania retirara el respaldo que alguna vez consideró otorgarle a Trump para el Nobel de la Paz.
