Estados Unidos
Protestas migratorias llegan a Nueva York: ¿se repetirá el caos vivido en Los Ángeles?
Las protestas contra las políticas migratorias de Trump y las redadas del ICE se expandieron de Los Ángeles a Nueva York.
La ola de protestas contra las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en zonas de Los Ángeles, especialmente en comunidades latinas, ha comenzado a extenderse a otras partes del país.
Esto se suma al reciente decreto presidencial que prohíbe la entrada de ciudadanos de 12 países a Estados Unidos y restringe severamente la expedición de visas.
Esta medida entró en vigor el pasado lunes 9 de junio y ha generado un fuerte rechazo.
Ahora, las manifestaciones no solo se concentran en California, sino que se han trasladado al estado de Nueva York, donde cientos de personas han salido a las calles para expresar su inconformidad con las nuevas políticas migratorias del gobierno de Donald Trump.
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Según reportó Telemundo 47, en las últimas semanas, varios migrantes que se presentaron puntualmente a sus audiencias judiciales fueron detenidos por ICE.
Además, se han cerrado múltiples casos judiciales sin previo aviso, lo que ha llevado a los manifestantes a denunciar que el Departamento de Policía de Nueva York estaría colaborando con las autoridades migratorias.
Ante estas acusaciones, Jessica Tisch, comisionada del Departamento de Policía de Nueva York, aseguró que la policía solo coopera con agencias federales en casos estrictamente criminales.
Las protestas están programadas para las cinco de la tarde de Nueva York, el martes 10 de junio en Foley Square, donde se ubican varias oficinas migratorias, entre ellas la sede de ICE en Nueva York y la oficina de USCIS.
Las manifestaciones, que hasta ahora han sido pacíficas y están amparadas por la Constitución de Estados Unidos, han generado preocupación, puesto que los eventos en Los Ángeles también comenzaron de forma pacífica.
Pero derivaron en disturbios que llevaron al presidente Trump a autorizar el uso de los Marines para restablecer el orden.
Esta medida fue rechazada por la alcaldesa de Los Ángeles y el gobernador de California, quienes incluso demandaron al presidente por considerarla inconstitucional.
Por su parte, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresó en rueda de prensa a los medios de comunicación su respaldo a las protestas pacíficas, pero advirtió que bajo ninguna circunstancia se tolerarán actos de violencia o daños a la propiedad privada.
Nueva York es una de las ciudades con mayor población migrante del país, por lo que existe la posibilidad de que las protestas escalen aún más que en California.
En este contexto, el liderazgo y manejo que ejerza el alcalde Adams en las próximas horas será clave para el desarrollo de la situación.
