La salud le jugó una mala pasada: influencer fitness revela la enfermedad que la dejó en cama

Maria Palen es una creadora de contenido que ha ganado reconocimiento en el mundo del fitness. Subía constantemente historias desde el gimnasio, y su disciplina en los buenos hábitos alimenticios y en el cuidado de su salud la hacían acreedora de un cuerpo esbelto y tonificado que solía presumir en redes sociales.

Pero ni la disciplina, ni la excelente condición física pudieron prepararla para la rara enfermedad que comenzó a desarrollarse silenciosamente en su cuerpo.

La influencer decidió romper el silencio a inicios del año pasado, cuando en uno de sus videos expresó: “Aquí está cómo perdí un año de mi vida y contando, porque todavía me siento muy mal”.

“Comenzó con pequeñas molestias, diminutos dolores que la mayoría de la gente podría ignorar, pero luego mi cuerpo me abandonó por completo”, relató mientras mostraba imágenes de sus populares rutinas en el gimnasio, contrastadas con dolorosos videos donde aparece siendo atendida por paramédicos.

A medida que avanzaba el año, Palen fue testigo de cómo su cuerpo al que tanto esfuerzo le había dedicado se iba “desgastando” al quedar confinada a una cama. Para marzo del año pasado, ya había perdido al menos 10 kilos.

“¿Por qué me estaba fallando mi cuerpo? Siempre he llevado un estilo de vida saludable. Esto no tenía ningún sentido. Rápidamente me di cuenta de que no era algo que pudiera arreglar con una dieta equilibrada o ejercicio", expresó en sus redes sociales.

Tras visitar distintos médicos y someterse a múltiples estudios, creyó en un inicio que podría tratarse de una enfermedad autoinmune. Sin embargo, con el paso de los días, descubrió que la realidad era otra.

“Un parásito escondido profundamente en mi torrente sanguíneo atacaba mis células de la sangre, dejándome inmovilizada con un insoportable dolor y gran fatiga. Fue completamente devastador para mi sistema inmune”, reveló la también ingeniera química.

El diagnóstico fue claro: había sido infectada por Babesia, un parásito que ingresó a su cuerpo a través de la picadura de una garrapata, infiltrándose en su sistema sanguíneo y afectando los glóbulos rojos.

“Llegó a ser muy grave algo tan sencillo como bloquear el celular o girar el volante del coche. Se convirtieron en momentos de agonía”, comentó Palen.

Durante su estancia en el hospital, su salud seguía sin mostrar mejoras, y el uso de analgésicos provocó que sus piernas se entumecieran. “Primero la izquierda, luego la derecha, hasta que me llegó al ombligo”, relató.

Hoy en día, Palen continúa aprendiendo a convivir con su padecimiento y mantiene una actitud positiva hacia su recuperación.

“Así que para todos los que pelean esta batalla similar, los veo, los escucho. Vamos a superarlo por completo”, expresó con entusiasmo a sus seguidores.

El caso de Palen demuestra que, aunque se tenga una vida saludable, la salud es un terreno frágil, impredecible y fuera de nuestro control absoluto.