Revelan impactante llamada que podría cambiar el caso de una colombiana y su suegra que asesinaron a un hombre en Italia

Siguen las polémicas por cuenta de la escalofriante historia del hombre que fue asesinado por su mamá y su esposa colombiana en Italia. El caso ha impactado a la población en el país europeo. La víctima fue identificada como Alessandro Venier, un hombre italiano de 35 años de edad.

Por su parte, las dos agresoras son Lorena Venier, su mamá, y su esposa Marilyn Castro Monsalvo, de 30 años y de nacionalidad colombiana. Mientras tanto, autoridades y medios de comunicación italianos dan a conocer más detalles del asesinato, entre ellos una reveladora llamada que recibieron los servicios de socorro.

“No, Lorena... ¡Ayuda! ¡Ven a Via dei Lotti!”. Tras un breve silencio, la voz de Marilyn Castro Monsaldo volvió a irrumpir en la línea del 112 con una frase que marcaría el rumbo de la investigación: “Mi suegra quiere matar a su hijo”. Fue ese llamado de emergencia, registrado la noche del viernes 25 de julio, el que alertó a los Carabineros sobre lo que, minutos después, resultó ser uno de los crímenes más macabros del año en Italia.

Cuando los agentes llegaron a la casa en San Stino di Livenza, la suegra de Marilyn, Lorena Venier, intentó restarle importancia a lo ocurrido. Afirmó que no pasaba nada y trató de impedir que la nuera hablara. Poco después, el cuerpo desmembrado de Alessandro Venier fue hallado en el garaje, oculto en un contenedor con cal viva.

Aunque Lorena ha confesado el asesinato, asegurando que actuó junto con Marilyn, la llamada de emergencia siembra dudas sobre esa versión. El audio, descrito por los investigadores como “una alerta desesperada”, revela a una mujer angustiada intentando frenar lo que estaba por suceder.

La frase “Mi suegra quiere matar a su hijo” ha cobrado nueva relevancia para la Fiscalía, que la considera prueba de que Marilyn intentó, en ese momento, impedir el crimen. Sin embargo, el testimonio de Lorena ofrece una versión radicalmente distinta.

Ante el fiscal, la madre de la víctima declaró que ambas mujeres planearon el asesinato juntas. “La vida de Marilyn corría peligro. O actuábamos de inmediato, o, en el extranjero, sin mí, se habría quitado la vida”, aseguró. Según su versión, “debimos haberlo matado primero”, antes de que Alessandro pudiera llevarse a su pareja y a la hija de ambos a Colombia, país al que tenía previsto mudarse al día siguiente.

El crimen, relatado con detalles escalofriantes por la propia Lorena, comenzó con una bebida adulterada con medicamento, seguida de dos inyecciones de insulina para asegurar que Alessandro no despertara. Después, en palabras de la madre, “Marilyn le agarró los cordones de los zapatos y lo remató”.

La defensa de Mailyn, sin embargo, sostiene que ella fue víctima de maltrato físico y psicológico tanto por parte de su pareja como de su suegra. La abogada Federica Tosel afirmó que su clienta tiene “varios hematomas recientes en los brazos”, y que al preguntarle por su origen, “respondió que se los había provocado su suegra”. También destacó que Marilyn estaba “confundida, aturdida por la medicación” cuando fue interrogada, y que apenas logró articular frases coherentes.