Mundo

Papa Francisco: ¿qué es un ictus, la causa oficial de la muerte del pontífice?

El deceso de Francisco ocurrió en la mañana de este lunes en su apartamento de Casa Santa Marta, en el Vaticano.

21 de abril de 2025, 8:23 p. m.
El papa Francisco saluda a la multitud desde el balcón principal de la basílica de San Pedro durante el mensaje Urbi et Orbi y la bendición a la ciudad y al mundo en el marco de las celebraciones de Pascua, en la plaza de San Pedro del Vaticano.
El papa Francisco saluda a la multitud desde el balcón principal de la basílica de San Pedro durante el mensaje Urbi et Orbi y la bendición a la ciudad y al mundo en el marco de las celebraciones de Pascua, en la plaza de San Pedro del Vaticano. | Foto: AFP

El papa Francisco murió este lunes, 21 de abril, como consecuencia de un ictus o accidente cerebrovascular y un colapso cardiocirculatorio irreversible, según confirmó el parte de defunción del director del Departamento de Salud e Higiene del Estado de la Ciudad del Vaticano, Andrea Arcangeli.

“Accidente cerebrovascular, coma, colapso cardiovascular irreversible. Estas son las causas de la muerte del papa Francisco, ocurrida esta mañana, a las 7:35 horas, en su apartamento de Casa Santa Marta”, indicó el portal oficial del Vaticano Vatican News.

La confirmación de la causa de la muerte se ha determinado mediante registro electrocardiotanatográfico.

El parte de defunción publicado por la Oficina de Prensa de la Santa Sede precisa que el papa tuvo un episodio previo de insuficiencia respiratoria aguda con neumonía multimicrobiana bilateral, bronquiectasias múltiples, hipertensión arterial y diabetes tipo II.

“Declaro que las causas de la muerte, según mi conocimiento y conciencia, son las indicadas anteriormente”, subrayó Arcangeli.

¿Qué es un accidente cerebrovascular o ictus?

Según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH), un accidente cerebrovascular (ACV) o ictus puede ocurrir cuando el flujo de sangre al cerebro queda bloqueado o cuando se produce un sangrado repentino en el cerebro.

La institución señala que existen dos tipos de ACV. “El primero, el accidente cerebrovascular isquémico, o infarto cerebral, se produce cuando el flujo sanguíneo no puede llegar al cerebro por un tapón. Si el cerebro no recibe oxígeno y nutrientes de la sangre, las células cerebrales comienzan a morir en pocos minutos. Por su parte, un accidente cerebrovascular hemorrágico, o derrame cerebral, se produce por un sangrado súbito en el cerebro. La sangre que se escapa de los vasos sanguíneos hace presión y daña las células cerebrales”, indica la institución en su sitio web.

Y agrega: “Casi el 90 % de los ACV se producen por una obstrucción de los vasos sanguíneos (accidentes isquémicos), y el resto se deben a sangrado interno (accidentes hemorrágicos)”.

El sumo pontífice había hablado de lo que cree que pasa después de la muerte.
Papa Francisco. | Foto: Getty Images

NIH indica que el ACV puede causar daño cerebral permanente, discapacidad a largo plazo o la muerte. Así mismo, puede producir distintos síntomas, desde debilidad leve hasta parálisis o pérdida de sensibilidad de un lado de la cara o del cuerpo. “Otros posibles síntomas son dolor de cabeza repentino y muy intenso, sensación súbita de debilidad, problemas de vista y dificultad para hablar o para entender lo que se le dice”, agrega.

Francisco pidió en su testamento que su sepulcro esté “en la tierra”, sin decoración y que diga “Franciscus”

El papa Francisco dejó escrito antes de morir un testamento en el que expresa su deseo de ser enterrado en el nicho de la nave lateral entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza de la Basílica Papal de Santa María la Mayor, y pide que su sepulcro esté “en la tierra”, que sea “sencillo”, sin decoración, y con la única inscripción ‘Franciscus’.

“Sintiendo que se acerca el fin de mi vida terrena y con viva esperanza en la Vida Eterna, deseo expresar mi voluntad sólo respecto al lugar de mi sepultura”, señala el Papa en el documento, difundido este lunes por la Oficina de Prensa de la Santa Sede.

Según expresa Bergoglio, siempre ha “confiado” su vida y su ministerio sacerdotal y episcopal “a la madre de nuestro señor, María santísima”. Por ello, pide que sus restos mortales “descansen en espera del día de la resurrección en la Basílica Papal de Santa María la Mayor”.

“Deseo que mi último viaje terrenal concluya precisamente en este antiguo santuario mariano donde fui a orar al inicio y al final de cada viaje apostólico para confiar con confianza mis intenciones a la madre inmaculada y agradecerle su cuidado dócil y maternal”, subraya.

En cuanto a los gastos para la preparación de su entierro, explica que “serán cubiertos por la suma del benefactor” que ha dispuesto trasladar a la Basílica Papal de Santa María la Mayor y de la que dice haber dado las “instrucciones oportunas a monseñor Rolandas Makrickas, comisionado extraordinario del Capítulo Liberiano”.

Con información de Europa Press