Mujer deportada de Estados Unidos reveló cómo descubrieron que había trabajado ilegalmente; hasta le revolcaron la ropa

Uno de los anhelos de cientos de personas es ingresar a Estados Unidos, algunos temporalmente y, para otros, es un propósito a largo plazo en búsqueda del “sueño americano”. Sin embargo; cuando se incumplen las normativas, ya siendo beneficiario de visa o al entrar irregularmente, los propósitos pueden terminar ‘desmoronándose’.

En ese sentido, las autoridades han sido enfáticas, pues quien no se ajuste a las disposiciones no solo se arriesga a la deportación, sino a fijar un antecedente ‘negativo‘ en el futuro. “No arriesgue su vida y los ahorros de su vida solo para que lo saquen de los Estados Unidos cuando llegue aquí”, fue el llamado del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, hace unos meses.

Tras la expiración del Título 42, y puesta en marcha del Título 8, las medidas restrictivas se han agudizado para los indocumentados. Este fortalece el control en las fronteras, detención de migrantes sin papeles y su deportación, tal cual informa la Voz de América. Disposiciones más ‘severas’ ya habían sido anunciadas por el Gobierno.

La ‘pesadilla’ de una mexicana

En TikTok varios latinos constantemente comparten cuál ha sido su proceso ad portas de entrar a Estados Unidos o cuando ya lo intentaron, pero sin éxito. Otros clips se enfocan en la razón que llevó a su deportación, aun tras ingresar por vías legales, pero al incumplir directrices que en ese país son ‘regla de oro’.

En esa plataforma, la mexicana Lizz contó que su expulsión fue hace tres años; sin embargo, se hizo viral al poder ser tomada como referente por otros latinos. Ella estuvo viviendo en Las Vegas y había obtenido un permiso de viaje como turista con el cual está prohibido trabajar, pero ella omitió el veto y laboró ilegalmente.

“Yo llegué en mayo y fui deportada en diciembre. Estuve los seis meses que te permiten estar dentro del país” y salió en ese lapso para no perder la visa. La joven llegó por tierra a Ciudad de México (donde estuvo dos semanas) porque se lo habían recomendado y otra sugerencia recibida fue regresar de la misma forma; sin embargo, optó por vía aérea.

Aunque pasó la revisión por Migración no pudo volver a entrar, pues cuando solo le faltaba recoger su maleta al creer que todo estaba “saliendo bien”, en sus palabras, la “agarraron” y sus planes terminaron ‘frustrados’.

Así fue la deportación

Para no levantar sospechas, la mexicana había comprado un vuelo de regreso como ‘garantía’ de que su intención era volver a su país; sin embargo, cuando no le faltaba mucho para salir —tal cual relató—, dos policías la abordaron y nuevamente le interrogaron sobre su tiempo de permanencia y uno de ellos surgió la duda de por qué ”no llevaba suficiente dinero en efectivo”.

Posteriormente, le revisaron la maleta y continuaron haciendo más preguntas. Minutos más tarde, según ella, le arrebataron el celular y uno de los oficiales buscó en la galería pruebas de que había estado en México. Luego, revisó el chat de WhatsApp con su entonces pareja y descubrió que la mexicana había trabajado irregularmente en Estados Unidos.

“Ya no hubo manera de negar las cosas. Es ahí cuando entonces me hacen guardar todas las cosas en mi maleta, porque aparte todo lo que me sacaron lo dejaron ahí aventado (...), y tuve que volver a guardar todo. Entonces me mandan al famosísimo cuarto de migración”, dijo la mujer.

Una vez ahí tuvo que esperar entre cuatro y cinco horas sin la posibilidad de hablar por teléfono, al comienzo. “Literalmente me tenían ahí detenida”, dijo. En ese punto recibió dos noticias: en la primera le confirmaron su regreso a México ese mismo día, pero otra ratificó uno de sus temores: la visa estaría desde ese momento retirada por cinco años.

Demandan al estado de Texas

Un empresario de Texas presentó una demanda contra un plan del gobernador, Greg Abbott, para colocar una barrera de boyas en el Río Bravo, frontera con México, e impedir el paso de migrantes, dijo el sábado el abogado del demandante.

“La instalación de la nueva barrera en el Río Grande [Río Bravo] comienza hoy. El Departamento de Seguridad Pública está supervisando el proyecto en Eagle Pass”, escribió Abbott en Twitter, quien difundió fotos de camiones con los enormes flotadores naranja.

Abbott acusa permanentemente al presidente Joe Biden de permitir el ingreso irregular de miles de migrantes al territorio y desatar una crisis. Ya ha dicho que tomará medidas al respecto.

Ante el anuncio, Jessie Fuentes, propietario de la firma estadounidense Epi’s Canoe and Kayak Team, que ofrece tours por el río en la zona de Eagle Pass, presentó una demanda contra el Estado y las autoridades envueltas en el asunto.

“Su negocio opera exactamente donde las boyas van a ser instaladas” y perjudica sus operaciones, dijo este sábado a AFP Carlos Flores, abogado de Fuentes.

“El gobernador de Texas y los demandados no tienen la autoridad legal para instalar esas boyas. La demanda pide impedir la instalación de estas y, si se instalan, que se retiren por orden judicial, porque no tienen permiso”, agregó. Detalló que la instalación de estas boyas también requiere la autorización de entidades federales, que hasta el viernes Abbott no había recibido.

De acuerdo con la agencia mencionada, el abogado recordó que estas boyas se están instalando amparadas en la operación “Lone Star” lanzada por Texas para asegurar sus fronteras pero que ha sido criticada por activistas y legisladores por excederse en sus atribuciones.

“Nos veremos en la corte (...) Esto irá hasta la Corte Suprema. Texas tiene el derecho constitucional de proteger su frontera”, comentó Abbott en sus redes tras conocer la demanda.