Misión de la ONU terminó su visita a Nagorno Karabaj: pidió que se respeten los derechos humanos

La misión de emergencia de Naciones Unidas pidió que se respeten los derechos de la población de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj tras finalizar una visita al territorio, que cuenta con poco menos de 1.000 armenios después del éxodo de más de 100.000 personas a raíz de la ofensiva relámpago del Ejército azerí.

El equipo, liderado por la coordinadora de la ONU en Azerbaiyán, Vladanka Andreeva, pidió “que se hagan todos los esfuerzos posibles para garantizar la protección de los derechos de la población local”, indicó en un comunicado la misión.

El personal de la ONU visitó la capital, Stepanakert, donde se citó con la población local, así como con sus interlocutores, en una ciudad todavía en pausa, puesto que no había tiendas abiertas. Durante la visita, no percibieron daños a la infraestructura civil, como hospitales, escuelas o viviendas, ni tampoco a sus edificios culturales y religiosos.

Así mismo, no detectaron indicios de violencia contra los civiles tras la operación militar lanzada por Bakú a finales de septiembre, si bien han expresado pesar por la forma en la que los residentes han tenido que abandonar sus hogares.

De la misma forma, el equipo de Naciones Unidas no observó daños contra los campos o animales muertos en el camino, aunque existe un acceso muy limitado a las áreas rurales y poca información disponible sobre el estado actual de la ganadería y la agricultura.

El personal de la ONU también pudo atravesar el corredor de Lachín y no vio ningún civil caminando hacia Armenia. No fue así en la capital, donde vieron un autobús con una docena de pasajeros que se dirigían a territorio armenio.

“A partir de las conversaciones que el equipo pudo mantener, es difícil determinar en este momento si la población local puede regresar. Lo que quedó claro es que es necesario generar confianza y esto requerirá tiempo y esfuerzo de todas las partes”, destacó.

Sin embargo, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señaló que muchos de los refugiados han emprendido “viajes arduos, a menudo caminando durante días y albergándose en cuevas o sótanos, soportando condiciones extremadamente difíciles”.

Además, el portavoz de la OIM, Joe Lowry, se referió a informes de desnutrición, sobre todo en ancianos y en niños, quienes también han sufrido fiebres altas y neumonía.

Finalmente, el equipo de la ONU hizo una parada en Aghdam, donde observaron destrucción y advirtieron que es necesaria una labor de desminado. En este sentido, se hicieron eco de los esfuerzos de reconstrucción por parte del Gobierno azerí.

ONU y el gobierno armenio

Naciones Unidas anunció este lunes 2 de octubre la apertura de dos clínicas móviles en Armenia, a las que se sumarán otras cuatro más próximamente, cuyo objetivo será brindar apoyo psicológico en colaboración con el Gobierno del país.

Otras agencias del organismo como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) o el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) también han colaborado en el envío de material sanitario e higiénico o mediante la formación de socios locales para responder a la violencia de género.

Aunque la prioridad de Naciones Unidas es brindar apoyo en salud mental, Lowry enfatizó que “la gente necesitará escuelas” y que hay que construirlas, y que se debe ayudar a los recién llegados a ganarse la vida con empleos y viviendas.

La estrategia de Azerbaiyán

La ofensiva relámpago lanzada por las fuerzas de Azerbaiyán llevó a capitular a los separatistas armenios el 20 de septiembre. Cerca de 600 personas murieron.

Esta derrota desató un éxodo de decenas de miles de civiles armenios de este enclave que se encuentra dentro de las fronteras internacionales de Azerbaiyán y fue escenario de dos guerras, una a principios de 1990 y la otra en 2020.

Las autoridades de la república conocida por los armenios como Artsaj decretaron el jueves su autodisolución a partir del primero de enero próximo.

El anuncio fue acogido con dolor en la república de Armenia, donde los opositores al primer ministro, Nikol Pashinyan, convocaron una manifestación el sábado por sus acusaciones de que podría haber hecho más durante la crisis.

*Con información de Europa Press y AFP.