Otorgan casa por cárcel a Paul Manafort, exasesor de Trump, por miedo a covid-19

Paul Manafort, exdirector de la campaña presidencial de Donald Trump, fue sentenciado en 2019 a casi siete años de cárcel por fraude fiscal y bancario, más cargos de conspiración relacionados con su trabajo como asesor de políticos ucranianos. El político de 71 años estaba pagando su pena en la prisión de Pensilvania, pero su complicado estado de salud lo llevará en época de pandemia a pasar el resto de la condena en casa.

Sus abogados habían manifestado que Manafort sufría de presión arterial alta y problemas respiratorios, lo que lo hacía más vulnerable a la covid-19. Por eso los defensores enviaron una solicitud a la Oficina Federal de Prisiones para pedir que su cliente recibiera el beneficio de detención domiciliaria. "El Sr. Manafort tiene un riesgo significativamente mayor de enfermedad grave o muerte", argumentó la defensa a la corte en su pedido de excarcelación el mes pasado.

El pedido fue aceptado y este miércoles se dio a conocer la noticia de su salida de la Cárcel de Loretto. Manafort actualmente vive en Alexandria, Virginia, en las afueras de Washington. 

El exjefe de campaña fue uno de los 2.471 reclusos del sistema penitenciario federal que fueron excarcelados y trasladados a encierro domiciliario debido a la pandemia de coronavirus, entre aproximadamente 150.000 prisioneros. Otros 2,1 millones de prisioneros están recluidos en penitenciarías estatales. 

Manafort fue uno de los seis exayudantes o asesores de la campaña de Trump que se declararon o fueron declarados culpables en la investigación sobre la interferencia rusa y la posible colusión en las elecciones de 2016. Michael Cohen, quien también estuvo envuelto en el escándalo, no corrió con la misma suerte de su antiguo colega puesto que se le negó la excarcelación el mes pasado, y continúa en prisión su condena de tres años.