Venezuela

Donald Trump aumenta las presiones contra Maduro y buscaría derrocar al dictador por cielo, mar y tierra. Así es el plan de Washington contra el régimen

Donald Trump aumenta la presión contra el régimen de Nicolás Maduro y podría aprobar operaciones militares en tierra, además de actividades secretas de la CIA en el vecino país. ¿Qué esperar ahora?

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18 de octubre de 2025, 5:06 a. m.
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La invasión terrestre de Venezuela por parte del Gobierno Trump tendría pocas posibilidades por su alto costo político y económico. | Foto: Getty Images / AP

Desde mediados de agosto, el gobierno de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, tomó cartas en el asunto contra el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. En un hecho inédito y que rompía totalmente con la política de presión diplomática que venía ejerciendo Washington desde hace casi una década, la Casa Blanca decidió enviar buques de guerra, aviones militares y hasta submarinos al Caribe con el objetivo de atacar a los grupos narcotraficantes. Pero eso solo fue el inicio y ahora, el objetivo parece ser sacar al dictador del poder a como dé lugar.

A pesar de que la situación pareció estancarse durante semanas, nunca hubo verdadera calma para la dictadura venezolana, que con el paso de los días luce cada vez más atemorizada ante la posibilidad de una acción militar por parte de Estados Unidos, ya sea en forma de invasión o de una operación a distancia contra la cúpula chavista que se apoderó del país, como también se ha especulado.

Esta semana, Donald Trump tomó una decisión radical que puso a la dictadura de Maduro a temblar: autorizó a la CIA a realizar acciones encubiertas en Venezuela. Con esto, la agencia de inteligencia estadounidense tendría aval presidencial para ejecutar misiones letales en Venezuela y realizar una variedad de operaciones en el Caribe.

Ejercito estadounidense en aguas del Caribe | Foto: Getty Images

“La agencia podría tomar medidas encubiertas contra Maduro o su gobierno, ya sea unilateralmente o en conjunto con una operación militar mayor. Se desconoce si la CIA planea operaciones en Venezuela o si están concebidas como una medida de contingencia”, fue lo que reveló el diario The New York Times y que hizo saltar las alarmas en Caracas.

Pero lo que terminó de desatar el miedo dentro del régimen de Nicolás Maduro fue cuando en la tarde del miércoles el presidente Trump, en la misma Casa Blanca, aseguró que ya no estaban buscando atacar por mar a las organizaciones narcotraficantes que salen de Venezuela, sino que ahora están pensando en la tierra, “porque ya tenemos bajo control el mar”, manifestó.

Aún se desconoce el alcance real que podría tener una eventual intervención terrestre en Venezuela, pues podría limitarse a golpear estructuras vinculadas al narcotráfico dentro del país. Sin embargo, no se descarta una acción directa contra el régimen, dado que la Casa Blanca considera a Nicolás Maduro, junto con Diosdado Cabello y Vladimir Padrino López, como los principales cabecillas del Cartel de los Soles.

Los ataques han ido tomando forma y el presidente estadounidense, junto a sus funcionarios más cercanos, no parecen dispuestos a pisar el freno. The New York Times también aseguró que la Casa Blanca, encabezada por Donald Trump, junto a su secretario de Estado, Marco Rubio, y el director de la CIA, John Ratcliffe, buscan a toda costa “expulsar a Maduro del poder” y se elaboran diferentes caminos para ello, a pesar de las voces contrarias a la intervención militar.

Nicolás Maduro y Donald Trump
Nicolás Maduro y Donald Trump | Foto: Getty Images

“Estados Unidos no ataca a un gobierno, porque no es un gobierno legítimamente constituido, ni para Washington, ni para la comunidad internacional, sino a una dictadura, a un cartel que ha tomado forma de dictadura y que se ha apropiado del Estado venezolano. Entonces, así es como lo entiende Trump, así es como lo entiende Marco Rubio, así es como lo entienden hoy oficialmente los Estados Unidos y buena parte de la comunidad internacional”, asegura Enrique Serrano, profesor de la Facultad de Estudios Internacionales, Políticos y Urbanos de la Universidad del Rosario.

Sobre una invasión convencional, como la que los Estados Unidos realizó en Panamá para deponer el régimen de Manuel Antonio Noriega, quien también estaba ligado al narcotráfico, las opciones parecen mucho más improbables por la cantidad de tropas y logística necesarias en un país del tamaño de Venezuela, aunque hay reportes que indican que en las últimas semanas los soldados estadounidenses en el Caribe han aumentado hasta 10.000 efectivos.

“Hay bajas probabilidades de que una invasión suceda, nunca serán cero, pero yo no veo ninguna posibilidad de una invasión militar a Venezuela; para mí está descartado. Porque es costoso, porque no hay suficiente personal para hacerlo y sobre todo porque eso tiene un costo reputacional muy importante para la imagen de los Estados Unidos”, dice el profesor de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Javeriana, Manuel Camilo González.

Pero sí podría ocurrir una acción directa en Venezuela. González ve más posible “un ataque de precisión, como los que ejecutó Estados Unidos contra Irán y sus instalaciones nucleares. Esto consistiría en apuntar a ciertos centros de operación de organizaciones criminales, que obviamente cuentan con redes de protección y cierta impunidad por parte de funcionarios del Gobierno venezolano”, dice en SEMANA.

Diosdado Cabello criticó la decisión de Donald Trump
Diosdado Cabello criticó la decisión de Donald Trump | Foto: Getty Images

La respuesta del régimen de Maduro se mantiene invariable desde que Washington lanzó la operación militar en el Caribe: reforzar su aparato militar y reclutar masivamente ciudadanos para proyectar una falsa imagen de cohesión en torno a una dictadura que luce cada vez más debilitada y que cuestiona abiertamente las medidas del gobierno de Trump. En esa línea, Diosdado Cabello acusó a la CIA de haber “promovido golpes de Estado, asesinatos de líderes y guerras sucias en toda la región”, en alusión directa al aval presidencial otorgado a la agencia de inteligencia.

Como muestra de la desesperación de Maduro y sus aliados, se han filtrado dos ofrecimientos que hicieron a Washington en las últimas semanas. La última fue revelada por el Miami Herald, donde a través del gobierno de Catar se envió una propuesta en la que Maduro cedería el poder a su vicepresidenta, Delcy Rodríguez, y su hermano, Jorge Rodríguez, quien es el presidente de la Asamblea Nacional. La idea fue rechazada tajantemente por el gobierno de Donald Trump.

El otro plan también tenía a Rodríguez frente al gobierno, aunque posteriormente cedería el poder al general retirado Miguel Rodríguez Torres, actualmente en el exilio, para que liderara un gobierno de transición. En cuanto a Maduro, permanecería en Venezuela y se le retirarían los cargos en su contra. Mientras que empresas estadounidenses podrían tener acceso a industrias petroleras y mineras en Venezuela. Tras varias negociaciones, esa propuesta también fue rechazada, ya que la Casa Blanca solo reconoce la dupla de Edmundo González y María Corina Machado como los gobernantes electos en el vecino país.

El retorno de la democracia en Venezuela se perfila como un escenario profundamente complejo, no solo por la presencia de colectivos armados chavistas, sino también por la dificultad de lograr una salida total de los miembros del régimen.

Nicolás Maduro, Donald Trump y María Corina Machado
Nicolás Maduro, Donald Trump y María Corina Machado | Foto: AFP Y GETTY

“La transición democrática será dura, lenta y difícil, incluso bajo un eventual gobierno de Edmundo González y María Corina Machado, porque el país enfrenta una economía en ruinas, millones de exiliados y graves desafíos de reconstrucción que podrían tardar al menos una década en superarse. La transición no será sencilla, ni hacia la democracia, ni hacia la estabilidad y el bienestar que los venezolanos necesitan con tanta urgencia”, advierte el profesor Serrano.

Por ahora, el futuro de Venezuela vuelve a situarse en el centro del tablero geopolítico. Mientras la Casa Blanca endurece su postura y multiplica la presión sobre el régimen de Maduro, el país sigue atrapado en la incertidumbre. Lo cierto es que las decisiones que tomen Washington y Caracas en las próximas semanas podrían marcar el comienzo de un cambio histórico en el vecino país.