Especial Inteligencia Artificial
Inteligencia artificial: ¿una tendencia pasajera o un cambio definitivo?
Esta tecnología se ha incrustado en nuestra vida cotidiana y pareciera que hoy no pudiéramos vivir sin ella, pero ¿qué pasará en la próxima década?
Aunque cinco o diez años atrás ya existía, poco hablábamos de ella, y hoy la inteligencia artificial (IA) es una tecnología casi inherente a nuestra vida cotidiana, a veces incluso de forma imperceptible. Con ella interactuamos al navegar en redes sociales, tomar y editar fotos, redactar textos, escuchar música, buscar información, ver series y muchas otras actividades diarias.
Sin embargo, como cualquier otra tecnología, es susceptible a los cambios, ya sea para mejorar, para actualizarse o, por qué no, para desaparecer y ser reemplazada por otra herramienta.
¿Qué sucederá con la IA en el futuro? Para Paolo Miscia, director del programa IAcelera del CESA, esta tecnología está llegando en la actualidad a su tercer nivel de desarrollo, en el cual tendrá mayor autonomía, pues hoy es como un “segundo cerebro sintético” que alojamos en el celular. Los dos primeros fueron los chatbots y los modelos capaces de dividir un problema en varios subproblemas y enfrentarlos paso a paso como si estuvieran razonando.
“Son IA que no solo te dan una respuesta, sino que son capaces de ponerla en práctica, de mandar un correo, de responder un chat, de generar un archivo, de hacer una compra, una venta. Todavía no es una tecnología que domina el mundo y se le revela al ser humano, pero no es lo mismo solo dar una respuesta, por más razonada que esté, a cumplir una acción y ser un agente en estos procesos, lo cual hoy es muy factible tecnológicamente”, señaló Miscia.
En palabras del experto, lejos de desaparecer, la IA seguirá sorprendiéndonos en distintos ámbitos, con diversos usos. Desarrollos como el modelo de Chat GPT 4.5 de OpenAI, que se presentó hace un par de meses, considerada la mejor inteligencia artificial conversacional, demuestran que el alcance de esta tecnología no tiene techo aún y plantean retos tanto para las personas como para las empresas.
Por ejemplo, en el caso de estas últimas, los avances en la IA van a exigir conformar estructuras híbridas en las que seres humanos y máquinas trabajen a la par, potenciando las habilidades de cada uno: los primeros en temas estratégicos y las segundas en asuntos operacionales y repetitivos.
Y frente a la pregunta de si la IA podría incluso llegar a desaparecer, Paolo Miscia aseguró que al ser una tecnología emergente (en especial en el caso de la IA generativa), aún no se sabe si cumplirá con todo lo que promete, pero la realidad es que su impacto hasta ahora es profundo.
“La IA no es flor de un día”
Para Tim Mucci, experto en IA de IBM, para 2034 esta tecnología habrá profundizado su protagonismo en distintos ámbitos de nuestra vida diaria, con una inclinación hacia el desarrollo de modelos de código abierto que permitirá la experimentación y el desarrollo de modelos más pequeños y eficientes para estimular la facilidad de uso y disminuir los costos.
“Iniciativas como Llama 3.1, un modelo de IA de código abierto con 400 mil millones de parámetros, y Mistral Large 2, lanzado con fines de investigación, ilustran la tendencia a fomentar la colaboración comunitaria en proyectos de IA a la vez que se mantienen los derechos comerciales”, señaló Mucci.
Y agregó que el creciente interés por modelos más pequeños ha llevado a la creación de modelos como el GPT 4o-mini, de 11 mil millones de parámetros, que es rápido y rentable. “No pasará mucho tiempo antes de que haya un modelo adecuado para integrarse en dispositivos como smartphones, especialmente a medida que el costo siga disminuyendo”, concluyó.
