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Así llegó el PAE a las zonas más alejadas del Huila. ¿Cómo mejora la vida de las comunidades campesinas?
El Huila es el primer departamento en llevar el PAE hasta las zonas rurales de difícil acceso, una iniciativa que ya funciona en seis escuelas.
El Programa de Alimentaciòn Escolar (PAE), una iniciativa que complementa la alimentación de los estudiantes de colegios de todo el país, ha enfrentado desde su creación, en 2006, un desafìo: llegar a las escuelas de las veredas más alejadas o de difícil acceso. Un reto que el departamento del Huila está superando de manera eficiente, convirtiéndose en el primero del país en mejorar el servicio alimentario en zonas rurales dispersas, una iniciativa que comenzó con dos escuelas rurales y ahora ya se implementa en seis.
La sede Las Nieves, de la Institución Educativa San Juan Bosco, en el municipio de Tarqui, y la sede la Montosa, del municipio de la Institución Educativa Marticas, en Acevedo, fueron los dos primeros colegios en recibir el programa PAE rural. Si bien los niños ya recibían un complemento alimentario, el servicio mejoró y ahora también almuerzan con sopa, seco, jugo y postre.
El éxito de esta estrategia liderada por la Gobernación permitió que el plan se extendiera a cuatro colegios más de los municipios de Garzón, Tesalia y Aipe. El gobernador Rodrigo Villalba Mosquera explicó que “esta modalidad del PAE para zonas rurales dispersas se presta a establecimientos educativos ubicados en sitios apartados de la geografía, con un máximo de 30 estudiantes”.
Además, detalló que el diferencial del programa es el trabajo en conjunto con las alcaldías, Juntas de Acción Comunal y Asociaciones de Padres de Familia. Por ejemplo, en el municipio de Acevedo, Adrián Gómez, secretario de Planeación Municipal, aseguró que la contribución logística fue clave.
“Desde la Alcaldía apoyamos en el mejoramiento de la estructura del restaurante y dotación de utensilios de cocina. Gracias a este esfuerzo conjunto logramos que 18 niños ya se beneficien del programa PAE rural”, puntualizó Gómez.
“Esto es un paso histórico: más eficiencia, calidad y compromiso comunitario para nuestros niños y niñas de las zonas rurales”, aseguró el gobernador.
El PAE beneficia a todos
El PAE no sólo beneficia a los estudiantes, también fortalece la economía local. Los operadores del restaurante escolar, por ejemplo, son los mismos padres de familia o los integrantes de la Junta de Acción Comunal.
“¿Quién mejor que nosotros para supervisar la alimentación escolar de nuestros hijos? El principal atractivo del PAE rural es poder prepararles alimentos frescos a nuestros niños, usando recetas autóctonas mediante el modelo de la olla comunitaria", explicó Jenny Rodríguez, madre de familia de la Institución La Ceja Mesitas, del municipio de Aipe.
Otra de las grandes apuestas que lidera la gobernación a través de este programa es apoyar a los campesinos locales, ya que todos los insumos del restaurante escolar provienen de la producción agrícola de las veredas.
Así lo confirmó Manuel Quilindo, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda La Montosa en Acevedo. “Esta iniciativa dinamiza nuestra economía, pues al ser nosotros los operadores, compramos productos de la región para la preparación de los alimentos. Es una responsabilidad social que asumimos con mucho cariño”, concluyó.
