Especial Sistema Financiero

Así es cómo el sistema financiero se volvió un aliado del consumo en Colombia

Los bancos ya no solo financian: hoy impulsan el consumo. En alianza con los comercios crearon un ecosistema que redefinió cómo, cuándo y por qué compran los colombianos.

23 de mayo de 2025, 10:00 p. m.
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Las alianzas entre entidades financieras y grandes superficies, plataformas digitales y tiendas especializadas están cambiando radicalmente cómo, cuándo y por qué compran los colombianos. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Por años, la banca fue vista como una institución lejana, dedicada al manejo de cuentas y préstamos. Pero en el panorama actual, donde los hábitos de consumo evolucionan al ritmo de la tecnología y las expectativas de los clientes, los bancos han emprendido una transformación profunda: ya no solo financian compras, sino que las estimulan, las facilitan y hasta las diseñan en conjunto con los comercios.

Las alianzas entre entidades financieras y grandes superficies, plataformas digitales y tiendas especializadas están cambiando radicalmente cómo, cuándo y por qué compran los colombianos.

Las compras ya no se rigen solo por el precio o la necesidad. En los últimos años, las decisiones de consumo de millones han comenzado a girar en torno a estas alianzas. Lo que alguna vez fue una relación transaccional entre banco y cliente, se ha transformado en una red compleja de beneficios, experiencias personalizadas y acceso preferencial a productos y servicios. El consumo, más que nunca, está mediado por la banca.

Este nuevo ecosistema ha sido impulsado, entre otros, por bancos que le apuestan a desarrollar productos financieros integrados directamente con las necesidades del consumidor actual. Beneficios como cuotas sin interés, descuentos exclusivos y experiencias de compra prioritarias se han vuelto parte esencial de su estrategia para fidelizar clientes, pero también para movilizar las ventas de los comercios aliados.

Casos como los de Bancolombia, Davivienda, Banco de Bogotá y Banco de Occidente evidencian cómo la banca ha dejado de estar en la periferia de las decisiones de compra y ahora se posiciona en su centro, transformando no solo la forma de pagar, sino también la forma de consumir.

Para Bancolombia, el acercamiento a la vida cotidiana del usuario ha sido clave. “Nos hemos dado cuenta de que el territorio de la moda es muy relevante en la cotidianidad de nuestros clientes”, explicó un vocero. La entidad estableció convenios con marcas del sector y creó un ecosistema de e-commerce, Tu360 Compras, que ofrece descuentos permanentes y experiencias como el Día Tu360. En tres años, ha movilizado cerca de 90.000 millones de pesos en ventas anuales.

Davivienda orienta su estrategia a integrarse en los momentos clave de decisión de compra. “Nos conectamos con los canales donde los clientes realmente viven, interactúan y consumen”, señalaron desde la entidad. Las alianzas impulsan sectores como tecnología, moda y hogar: “Cuando alineamos nuestras soluciones con lo que las personas realmente quieren y necesitan, logramos lo esencial: que la banca esté presente para llevar bienestar a las familias colombianas”.

El Banco de Bogotá optó por insertarse directamente en el momento de la compra, con créditos digitales emitidos en minutos en tiendas físicas y virtuales. “Ofrecemos créditos con 0 por ciento de interés, ya sea a corto plazo con nuestro producto Ceropay o a largo plazo con cofinanciación entre el banco y el comercio. Es una propuesta diferenciada que se adapta al cliente”, explicó Luis Ernesto Pontón, gerente de Open Banking y Aliados Digitales. La estrategia ha beneficiado a más de un millón de clientes, el 80 por ciento nuevos para la entidad, y ha generado aumentos del 36 por ciento en el ticket promedio y del 20 por ciento en unidades vendidas.

En el caso del Banco de Occidente, las alianzas abarcan desde aerolíneas hasta moda y tecnología. “Estas alianzas más que cambiar los patrones de consumo de los clientes, los acentúan”, indicó Gerardo Silva, presidente de la entidad. Desde su Unidad de Alianzas y Convenios, estructuran acuerdos con proveedores para ofrecer condiciones preferenciales en la adquisición de activos, además de beneficios para el consumidor final como cuotas sin interés y promociones por temporada. “El gran beneficiado con estas alianzas es el cliente”, afirmó Silva.

Esta transformación también se refleja en el sector retail. Cencosud, por ejemplo, ha fortalecido su relación con los consumidores a través de alianzas estratégicas que generan fidelización y recurrencia. Campañas como Lunes de Mercado con Banco Itaú, Martes de Frutas y Verduras con Grupo Aval, y Miércoles de Carnes y Viernes de Pescadería con BBVA son solo algunos ejemplos de cómo las dinámicas comerciales y las activaciones en tienda impulsan el consumo. Además de las piezas publicitarias, estas iniciativas están respaldadas por contratos y ofertas mercantiles que garantizan transparencia, confidencialidad y protección en el tratamiento de datos, fortaleciendo la confianza de los usuarios en cada transacción.

Cuotas sin interés

Este modelo ha sido replicado con gran éxito en el entorno digital por plataformas como Mercado Pago, que ha revolucionado el comportamiento de consumo en línea dentro del ecosistema de Mercado Libre.

Marco Toschi, senior manager de Mercado Pago Colombia, aseguró que el modelo de cuotas sin interés ha sido clave en este cambio: “Eliminó barreras de acceso para miles de usuarios. Esta solución, sin costo para el comprador, ha permitido financiar compras de manera más planificada, promoviendo la inclusión financiera y una mayor participación de usuarios previamente inactivos”.

Las cifras respaldan esta afirmación. En el último Hot Sale, las transacciones con cuotas sin interés representaron hasta el 30 por ciento de los pagos con tarjeta de crédito en las marcas que activaron este beneficio. Esto no solo significa más compras, sino compras más grandes: el ticket promedio ha aumentado hasta un 50 por ciento en categorías de alto valor como electrodomésticos, celulares y moda. Además, más de 150 marcas ya se han sumado a la estrategia, con incrementos en ventas de hasta el 25 por ciento, lo que reafirma el impacto positivo del modelo para los comercios aliados.

Para Mercado Pago, las alianzas con nueve de los principales bancos del país, incluidas entidades del Grupo Aval, Davivienda, BBVA, Itaú y Scotiabank, han permitido escalar este beneficio de forma masiva. Pero no se detienen ahí: esperan integrar tres bancos adicionales este año y seguir expandiendo su red de comercios.

“Esta modalidad ha incrementado la frecuencia de compra entre los usuarios recurrentes y ha permitido a los comercios enfocarse en vender de forma más efectiva, sabiendo que cuentan con una solución segura, ágil y sin costo para el cliente final”, enfatizó Toschi.

Nequi no se detiene

En un escenario cada vez más digital, también hay plataformas como Nequi que están aprovechando el potencial de las alianzas para integrar el consumo cotidiano con soluciones financieras innovadoras. “Hemos entendido que, para transformar la relación de los colombianos con su dinero, es clave estar donde las personas viven su día a día: en sus marcas favoritas, plataformas digitales y comercios físicos”, explicó María del Pilar Correa, líder de estrategia de negocio de Nequi. La entidad ha consolidado alianzas con pasarelas de pago y marcas nacionales para facilitar el uso de su botón de pago en más de 3 millones de usuarios activos. El crecimiento es evidente. En el último año, Nequi duplicó sus transacciones, al alcanzar más de 11,5 millones de operaciones, con una proporción significativa vinculada al pago de suscripciones digitales y compras en línea.

Su impacto, sin embargo, no se limita al e-commerce: con nuevas soluciones para iniciar pagos desde notificaciones push en tiendas físicas, Nequi está cerrando la brecha entre el mundo digital y el comercio tradicional, mejorando la trazabilidad de las operaciones y reduciendo el abandono en el proceso de pago.

Para Correa, estas sinergias abren un nuevo capítulo en la relación entre bancos, comercios y consumidores: “Estamos convencidos de que estas sinergias no solo dinamizan el consumo y robustecen el sistema, sino que abren la puerta a nuevas formas de integración entre el mundo financiero digital y las dinámicas comerciales del país”.

Y es que detrás de cada pago más ágil, de cada promoción inteligente o de cada cuota sin interés, se está construyendo un ecosistema más accesible, competitivo y alineado con las nuevas exigencias de los colombianos.

Más allá del crédito o los descuentos, lo que estas alianzas demuestran es que la banca ha entendido que el consumo no es un punto final, sino un espacio de relación continua con el usuario. Un terreno donde se construyen confianza, acceso e inclusión.