Gente

La boda del año en la península: se casa Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler, reina de la alta sociedad española

Serán tres días de celebración desde este viernes, luego de que el novio, Íñigo Onieva, le fuera infiel a Falcó justo cuando acababa de proponerle matrimonio. Detalles del fastuoso suceso.

7 de julio de 2023
Tamara Falcó.
La marquesa de Griñón se casa con Íñigo Onieva, un joven millonario dedicado al negocio de los restaurantes. | Foto: Europa Press via Getty Images

Si algo ha esperado la novelera España desde hace años es ver vestida de novia a Tamara Falcó, marquesa de Griñón y la hija más mediática de Isabel Preysler, exesposa de Julio Iglesias y sin duda la mujer más famosa de la península ibérica, relacionada hasta hace poco con el nobel Mario Vargas Llosa.

Ahora, por fin, ha llegado el momento y el suceso no puede ser calificado de otra manera: la boda del año, puesto que, al igual que su madre, la marquesa no solo es exitosa, sino que todo el mundo sigue a pie juntillas su vida y milagros.

De hecho, Falcó es considerada como la respuesta española a Kim Kardashian, dado que se volvió una de las mayores influencers del país y una reputada marca que cobija, en particular ropa y productos relacionados con el buen vivir.

Tamara Falcó. Íñigo Onieva. Foto: Instagram @ionieva
Se casan ante 400 invitados en El Rincón, la propiedad donde está el palacio de los marqueses de Griñón. Foto: Instagram @ionieva | Foto: Foto: Instagram @ionieva

Además, Netflix le hizo su propia serie, en la cual ella contó cómo era su vida de it girl a la española, emparentada con las personalidades más conocidas del país.

Así mismo, siempre se supo que su casamiento congregaría uno de esos desfiles de celebridades que tanto fascinan en el país donde circulan y se emiten las revistas y programas de chismes de sociedad mejor vendidos y sintonizados del planeta.

Así será desde este viernes, cuando Tamara, la Preysler, los Iglesias y demás encopetados miembros de su familia empiecen a ser los anfitriones de personajes de la realeza, aristócratas, estrellas de cine y televisión y millonarios.

En el primer día de celebraciones, los novios darán una recepción, hasta la 1:00 de la madrugada, en el glamuroso hotel Ritz de Madrid, para los invitados procedentes de fuera de Madrid y de España, que son unos 200.

Isabel Preysler, Mario Vargas Llosa y Támara Falcó
Unos comentarios de Tamara sobre la comunidad LGBTI habrían desatado la separación de su madre, Isabel Preysler, de Mario Vargas Llosa. | Foto: Instagram @tamara_falco

De acuerdo con la revista ¡Hola!, el menú será de clara inspiración española y habrá una presentación de flamenco.

El evento central, el casamiento, tendrá lugar el sábado 8 de julio y seguro marcará la pauta para los futuros matrimonios de la high life ibérica.

Unos 400 invitados se congregarán en El Rincón, la propiedad que alberga desde hace décadas el palacio de los marqueses de Griñón, uno de los títulos nobiliarios más antiguos de España y con nexos con la conocida casa de Alba.

La ceremonia religiosa y la fiesta, como le contó la marquesa a ¡Hola!, serán completamente al aire libre, aunque hay un plan B por si llueve, en este acontecimiento social que estará a cargo de un staff de 250 personas.

Un coro de doce voces más instrumentos acompañará la misa, en tanto que Miguel y Mateo Verdasco Boyer, sobrinos de la novia, serán los pajecitos.

Ese día, Tamara lucirá un modelo de Carolina Herrera, cuyos bocetos, por supuesto no se han dado a conocer, aunque ella contó que estará inspirado en el traje nupcial con que Grace Kelly se casó con Rainiero III de Mónaco en 1956.

Tras la ceremonia, vendrá un coctel amenizado con música en vivo y un show de cocina.

De ahí, los invitados serán invitados a trasladarse al jardín norte del palacio, donde se servirá la cena, al pie de un estanque lleno de nenúfares.

En las mesas y el menú, los invitados encontrarán detalles personalizados para ellos y degustarán de los platos en un ambiente totalmente iluminado por velas.

La comida estará a cargo del chef Eneko Atxa, con cinco estrellas Michelín, quien contará con 45 cocineros para su preparación.

Pasada la media noche, vendrá el baile, amenizado por un Dj, para el cual la marquesa lucirá otro modelo.

Habrá barras de coctelería, estaciones de champaña Moët & Chandon y destilados premium servidos por bartenders.

Tamara Falcó
Íñigo fue pillado en una infidelidad a Tamara justo cuando acababa de proponerle matrimonio, el año pasado. | Foto: Tamara Falcó. Íñigo Onieva. Foto: Instagram @ionieva

Entre los invitados, estarán los hermanos mayores de Támara, Julio José Iglesias y Chábeli Iglesias, hijos de su madre con el cantante Julio Iglesias, además de Ana Boyer Preysler, la hija menor de la Preysler. No se sabe si el cantante Enrique Iglesias se hará presente, ya que no ha asistido a las otras bodas de la familia.

Por el lado de la realeza asistirá el príncipe Christian de Hanover, hijastro de Carolina de Mónaco, mientras que la nobleza tendrá una amplia representación debido a que la novia es una de ellos. La más destacada será la Eugenia Martínez de Irujo, duquesa de Montoro e hija de la fallecida duquesa de Alba, la mujer con más títulos nobiliarios en la historia.

Por el lado de la farándula, a la cual Tamara es muy cercana, se verán a los jurados del programa MasterChef, es decir, Samantha Vallejo-Nájera, Pepe Rodríguez y Jordi Cruz, y el presentador de El Hormiguero, Pablo Motos.

Al día siguiente, por la tarde, los nuevos esposos volverán a dar una recepción para sus invitados venidos de fuera en el Ritz, a manera de despedida y agradecimiento por su presencia.

Sin embargo, el gran suceso de élite española en 2023 bien pudo no ser, ya que, en octubre del año pasado, la pareja sufrió un duro revés, cuando se conocieron unas fotos en que Íñigo besaba a otra mujer.

El momento no pudo ser peor, pues él acaba de proponerle matrimonio con un ostentoso anillo del orfebre Repossi, de Turín, favorito de la realeza.

Pero tras un breve lapso se ruptura, se reconciliaron y ahora se aprestan a protagonizar lo que en el lenguaje callejero español se conoce como “un bodón”.