Gente
Ana Obregón presenta en sociedad a su hija adoptiva, concebida con el esperma de su hijo fallecido
La actriz española contó toda la verdad sobre su nueva hija, que en realidad es su nieta.
España vive un huracán de escándalos farandulescos dignos de una seguidilla de películas hollywoodenses, en las que Shakira y Piqué no son los únicos que ponen a pelear a los amantes de las historias rosas escogiendo bandos entre el supuesto villano y la posible víctima. Ahora, la actriz Ana Obregón le quitó la banca a la expareja para ser el tema central con su nueva hija, Ana Sandra, quien llega a su vida a sus 68 años.
El hecho que Obregón se convierta en madre 30 años después de que lo fue por primera vez ha sido todo un acontecimiento en el continente europeo, pues la mayoría de las veces las mujeres a esta edad quieren disfrutar de su vida en tranquilidad y quizás con niños a su alrededor, pero que no son sus hijos, sino sus nietos, cumpliendo con la hermosa tarea de ser abuelas alcahuetas y divertidas para las nuevas generaciones familiares.
Sin embargo, el caso de Obregón es muy diferente, pues en teoría encaja a la perfección en el rol de abuela, pero con el detalle de que la pequeña nacida el pasado 20 de marzo es su hija de forma legal, pues esta nació a través de un vientre subrogado en Miami, proceso que la actriz inició en solitario y ha llevado a cabo sin ningún tipo de consenso con nadie, más que con el equipo de médicos y abogados que supervisan este tipo de procedimientos de gestación.
La revista Hola! fue la primera en publicar la noticia y le hizo seguimiento hasta lograr las primeras imágenes de Obregón junto a su nueva hija en la capital de la Florida, Estados Unidos, para luego ponerlas en su más reciente portada, donde la artista española contó todos los pormenores de la nueva integrante de la familia y la razón por la cual ella llegó a este mundo.
Tendencias
“Lo primero que tienes que saber es que esta niña no es mi hija, sino mi nieta. Es hija de Aless y cuando crezca le contaré que su padre fue un héroe, para que sepa quién es y lo orgullosa que tiene que estar de él… Lo que la gente no sabe es que esta fue la última voluntad de Aless: la de traer un hijo suyo al mundo. Y así nos lo comunicó de palabra a su padre y a mí una semana antes de fallecer. Esto se llama ‘testamento ológrafo’”, relató Obregón en entrevista con Mamen Sánchez.
Cabe recordar que Aless Lequio, hijo de la actriz, murió en 2020 a sus 27 años a causa de un sarcoma de Ewing, un tipo de cáncer muy raro que afecta en su mayoría a niños y jóvenes. En su entrevista, Obregón aseguró que antes de que el joven iniciara el proceso de quimioterapias para tratar su cáncer, los médicos le recomendaron congelar su esperma, pues el tratamiento podría dejarle secuelas para procrear.
Luego, cuando se dio la fatídica y temprana muerte de Lequio, Obregón, en medio de su dolor, emprendió el difícil trabajo de buscar la forma de tener la descendencia que su hijo quiso tener y un vientre subrogado fue la mejor forma para hacerlo, pues Aless hizo bien su tarea y su parte ya estaba hecha, solo quedaba encontrar el donante del óvulo y la persona apta para dar a luz a la pequeña Ana Sandra, quien llegó a este mundo tres semanas antes de lo esperado y en perfectas condiciones de salud.
Uno de los puntos álgidos del debate que protagoniza Obregón en España es sobre lo ético que fue usar el esperma de su hijo para concebir a su nieta, sin embargo, ella está muy al tanto de las habladurías y tiene una respuesta contundente: “este debate es absurdo, porque esta técnica de reproducción asistida se lleva haciendo muchísimos años y es legal en muchos países del mundo. Muchas parejas que no pueden tener hijos o parejas homosexuales o por los motivos que sean utilizan esta técnica. ¿Pero qué escándalo es este, ahora?”.
Además, Ana sabe muy bien que su conciencia está tranquila, pues cumplió con la última voluntad de su hijo, a quien prometió salvar y no lo logró. “Nadie en el mundo puede poner en duda que cuando una madre entierra a su hijo tiene que cumplir su última voluntad. Solo una persona cruel de corazón o una persona que no lo tenga pensaría algo así. Si hay opiniones en contra, yo no aguanto ninguna, ni voy a admitir ninguna. Nada más que la de un padre o una madre que hayan enterrado un hijo. Solo ellos son los que pueden opinar y los que me pueden entender”, declaró a Hola!