Empresas
SuperSalud anuncia auditoría forense contra la Nueva EPS, tras deudas millonarias y pasivos ocultos
Aseguró que estabilizarla será un proceso difícil.

La Superintendencia de Salud se pronunció este 10 de septiembre luego de que la Contraloría General de la Nación encontrara cerca de 22,7 millones de facturas sin procesar, con un valor cercano a los $22,1 billones de pesos, de las cuales 9,1 millones corresponden a registros repetidos.
Las cifras resultan preocupantes por la necesidad de un diagnóstico sobre el manejo de los recursos que tiene esta EPS. Ante dicho panorama, la SuperSalud aseguró que tomará tres medidas fundamentales para garantizar el correcto funcionamiento de la prestadora de salud.

El primero es la realización de una auditoría forense internacional, que revisará las cuentas médicas entre 2019 y 2025 para lograr un diagnóstico detallado de la situación financiera.
Además de ello, harán una auditoría de cuentas médicas para precisar el flujo de recursos desde la UPC hasta los prestadores, con el fin de garantizar la trazabilidad y transparencia.
La tercera medida es la regularización de giros, la organización de pagos a la red pública y la privada, con el objetivo de estabilizar la liquidez y reducir los riesgos de afectación a los afiliados.

Las decisiones se suman a la intervención administrativa que la SuperSalud prorrogó en abril, en respuesta a la falta de estados financieros certificados de 2023 y 2024. Dicho proceso busca dar mayores claridades en la EPS, que tiene una quinta parte de la población afiliada al sistema.
El superintendente nacional de Salud, Giovanni Rubiano García, aseguró que hace algunos meses ya se habían hecho varias advertencias desde finales del año pasado.

“El desastre de Nueva EPS no es nuevo. Esta administración compulsó copias en diciembre de 2024 (…) sobre los hallazgos más significativos en Nueva EPS y que tienen relación con la omisión deliberada de pasivos en los balances financieros presentados por la aseguradora”, indicó el directivo. Agregó además que se trata de deudas billonarias y pasivos ocultos de distintos años, que no fueron procesados ni contabilizados en informes oficiales.