Finanzas públicas
Presupuesto 2026: aunque el Gobierno bajaría el monto, la sumatoria por el ‘no’ de los congresistas sería mayoritaria
Estas serían las cuentas de cómo votarían las comisiones económicas del Parlamento. Para este 11 de septiembre, está previsto el debate en conjuntas. El llamado es a que la discusión sea técnica y no política.
Con más de 7 días de reuniones entre el Gobierno, los ponentes y coordinadores del presupuesto 2026, este jueves, 11 de septiembre, se daría el debate oficial en las comisiones económicas del Congreso de la República (terceras y cuartas de Senado y Cámara) para discutir el monto del presupuesto, ya que antes del 15 de septiembre tendrá que haber una decisión en ese sentido.
Fuentes cercanas al proceso contaron a SEMANA que, aunque el Gobierno habría manifestado su intención de bajar la apuesta ―que originalmente es de 556,9 billones de pesos― la mayoría de los congresistas que hacen parte de las decisiones votaría por el ‘no’, según expresaron tan pronto como fue radicada la iniciativa.
Por ejemplo, en la Comisión IV de Senado, con 15 integrantes, 8 ya habrían dicho que se irían por el ‘no’, mientras que otros 5 estarían indecisos y dos expresaron su firme intención de votar afirmativamente.

En la comisión tercera de Senado, entre tanto, de 16, un total de 10 dijeron en los inicios del trámite que se irían por el ‘no’. Eso sí, la posición estaba condicionada a la reducción del monto, pero no solo en proporción en la que estaría dispuesto a hacer el gobierno: 10 millones de pesos, ―según trascendió en las reuniones―, sino en la totalidad del monto que se cubriría con la ley de financiamiento: 26,3 billones de pesos.
Por todos esos mensajes enviados, hay una amplia expectativa por lo que sucederá en el debate de este jueves 11 de septiembre, pues ha ‘pasado mucha agua bajo el puente’ en las reuniones de coordinación y discusión para hacer ajustes a la carta financiera del Estado para el próximo año.
Con técnica, no con política
Una de las disyuntivas que hay ahora con la votación del proyecto de presupuesto para 2026 es la de la proximidad de las elecciones, tanto de Congreso, como de Presidencia.
En consecuencia, pesan mucho los argumentos políticos, porque los parlamentarios que aspiran a ‘repetir’ en el Congreso, con la continuidad de su curul, buscan congraciarse con los electores, haciéndoles creer que sus decisiones son en beneficio de la gente.
No obstante, algunos analistas políticos que conocen el ‘engranaje’ del Congreso por dentro, afirman que ahora empezarán a jugar la carta de los gremios que representan poderosos sectores económicos. Principalmente en la atadura que tiene la ley de financiamiento con el presupuesto, toman el camino de demorar la discusión, argumentando que no avalan el monto por la incertidumbre con su financiación.
Dicha posición les hace ver ante los electores como sensatos, pero, en el fondo, lo que buscan es que los gremios económicos se acerquen a ellos para pedirles interceder para ajustar medidas que los afecten. En ese encuentro, pueden aprovechar para solicitar financiaciones de campañas.
En el juego político, el propio Gobierno podría buscar que no se llegue a acuerdos, pues, de esa manera, se repetiría la historia del año anterior, cuando el presupuesto de 2025 ―el vigente en la actualidad― fue emitido por decreto. Sin embargo, también, políticamente, es conveniente dar el mensaje de diálogo y logro de consensos.
De ahí que el llamado de muchos economistas y líderes de opinión es que las decisiones se tomen con base en las realidades comunes de los colombianos y de las posibilidades de los recursos que se pueden obtener en el país.
Hora de dejar a un lado intereses individuales y realmente decidir por el bienestar ciudadano.
