Convención bancaria
Ministra de Agricultura anunció que el Banco Agrario será “un gran banco público” en el gobierno Petro
La funcionaria dijo, en plena Convención Bancaria, que se buscará volver a traer entidades de financiamiento del sector rural que perdieron su vocación por competir con la banca comercial.
El Ministerio de Agricultura está en una crisis tremenda. Primero, porque se concentró en la importación; segundo, porque fue politizado, y tercero, porque la paz la dejó a un lado, como algo que no era importante. En consecuencia, “no tenemos institucionalidad”. Ese fue el arranque de la ministra de Agricultura, Cecilia López. En su intervención ante la banca comercial, dijo que el camino que se tomará será hacer del Banco Agrario “un gran banco público”.
Las expresiones de la ministra no dejaron de sorprender, pese a que han sido escuchadas en el pasado, porque ahora las expuso frente a un sector que está tratando de meterse con el financiamiento del campo.
Así mismo, la búsqueda es volver a traer al sector rural entidades como Finagro, que se fueron de allí, con lo cual “perdieron su vocación” y se dedicaron a competir con la banca comercial.
El modelo en el que estarían pensando sería parecido al de Brasil, en donde es la tercera entidad de financiamiento del país.
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Tremenda petición en el presupuesto
López insistió en que esta vez el país está cambiando y expresó que lo que harán desde esa cartera será clave para el sector, sin el cual no se podrá desarrollar el país.
Desde esa perspectiva, la ministra de Agricultura dijo que en medio de la discusión del proyecto de presupuesto para 2023, pedirá que incremente al menos en el 30 %, para poder desarrollar la productividad.
De hecho, señaló que ha adelantado indagaciones para identificar a quiénes les está llegando el crédito en el campo y pudo establecer que el valor promedio de los préstamos es de entre 8 y 10 millones de pesos, con lo cual identificó que a la gente que necesita 1 millón de pesos no está llegando la financiación.
Tras exponer esos diagnósticos, dijo que la política agraria tendrá varios puntos, pese a que están atravesados por una transversalidad: el punto 1 que fue negociado en La Habana, con el acuerdo de paz.
Ratificó que el primer componente de una reforma agraria será el de usar la tierra de los narcos, para lo cual ya avanza en revisiones de las estadísticas de la SAE (Sociedad de Activos Especiales). “Lo que se distribuirá será la tierra productiva y algo de baldíos”, sostuvo.
De igual manera, dentro de sus retos estará el de acelerar la titulación de la tierra y poner al día el catastro multipropósito, por lo que hace un llamado a que se aplaque la histeria con el pago del predial, principalmente porque “los campesinos no tendrán de qué preocuparse, no se les valorizó la tierra”. En cambio, agregó, “las grandes extensiones que hoy tienen vías 4G”, no tributan con base en ello. “No se trata de un abandono de la agricultura moderna”, aclaró.
En medio de todos los planes, López puso en el centro el papel crucial del crédito, pues, por el contrario, “no creo en los subsidios”, estableció.
Si bien el crédito pasó del 18 al 31,4 %, sigue habiendo problemas de acceso, lo que –dijo– se resuelve “con conectividad digital para abaratar los costos de los créditos”.