De gota en gota se llena el vaso. Comisión interparlamentaria de crédito aprueba nuevo empréstito a Colombia, ahora con Alemania

Después de algún tiempo sin que el Ministerio de Hacienda convocara a la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público, que la integran 6 participantes del poder legislativo, se produjo un encuentro que terminó con la aprobación de un nuevo empréstito, esta vez con Alemania.

Si bien el endeudamiento es una fuente de financiación para un Estado, en el caso colombiano, la deuda pública ha ido creciendo, al punto de que ya sobrepasa el 60 % del producto interno bruto (PIB). Ese nivel, que además es considerado como histórico, si se tiene en cuenta que el mayor crecimiento de las obligaciones crediticias subió exponencialmente en tan solo un año, sigue en aumento y podría llegar a 63 % en este año.

La deuda pública, en pesos, supera los 1.050 billones de pesos, por lo cual, no hay que perder de vista la decisión que tomó la Comisión Interparlamentaria de Crédito, cuya misión es emitir concepto favorable a las operaciones de crédito internacional que haga el gobierno, de avalar que la nación celebre un empréstito externo con KfW, considerado como uno de los mayores bancos de desarrollo del mundo.

El crédito que recibió el concepto favorable de la Comisión Interparlamentaria es por 300 millones de euros, lo que en pesos supera los 1,4 billones, cifra que podría sonar como una gota frente a la deuda pública total, pero de gota en gota se va llenando más el vaso.

Según explica el representante a la Cámara, Christian Garcés, integrante de las comisiones económicas del Congreso, “la aprobación de empréstitos por parte del equipo interparlamentario habilita al gobierno para tomar nueva deuda. Por lo tanto, una vez se hace uso efectivo del crédito aprobado, ese monto se suma al total de la deuda pública del país”.

El asunto es que, aunque exista una Comisión Interparlamentaria de Crédito Público que se reúne con el gobierno, no habría forma de que ponga la talanquera a nuevos empréstitos. Un decreto del Ministerio de Hacienda que se basó en una sentencia de la Corte Constitucional recordó que “en caso de que este organismo (la Comisión Interparlamentaria) no emita concepto favorable, el Ejecutivo puede apartarse de sus recomendaciones, dado que tal concepto no tiene carácter vinculante”.

Sin embargo, dicha comisión ya ha emitido varios conceptos favorables para la toma de empréstitos, como ocurrió en septiembre del año pasado, cuando avaló un préstamo de 138,5 millones de dólares.

Y la agravante de los créditos que toma Colombia en el momento es que está pagando intereses más costosos, por el riesgo país, lo que a su vez demanda mayores recursos que podrían utilizarse en obras para la gente. Tanto así que, según expresa Óscar Darío Pérez, congresista también integrante de las comisiones económicas que abordan estos temas, “de cada 3 pesos que recaudamos, uno se va en pago del servicio de la deuda, en el interés. Eso es desastroso”.

Lo cierto es que Pérez también se mostró preocupado por el concepto favorable emitido por la Comisión Interparlamentaria de Crédito, ya que dicho empréstito sumaría más deuda, en un escenario mucho más alarmante aún, y es que se tome deuda para pagar deuda, porque si se hiciera para invertir y generar desarrollo, el panorama sería distinto.

De ahí que el llamado insistente, ahora que el gobierno revisa las cuentas y las destapará, con los ajustes que se espera que traigan, el 13 de junio, cuando se presente el Marco Fiscal de Mediano Plazo 2025. La clave estará en que el nuevo plan para el manejo fiscal se enfoque más en un verdadero apretón que le ponga freno al gasto, como lo han recomendado los expertos, que ya han argumentado que esa sería la única manera de que el país recupere algo de confianza.