Cápsula
ONU Colombia aprueba su plan de trabajo para impulsar la igualdad de género este 2025
El plan aprobado, que será coliderado por ONU Mujeres y por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), responde al Marco de Cooperación del Sistema de Naciones Unidas acordado con el Gobierno Nacional

En el año del 30 aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, un momento crucial para avanzar en el logro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, el equipo país de Naciones Unidas en Colombia, aprobó su plan de aceleración para contribuir al avance de los derechos de las mujeres y el logro de la igualdad de género en el país.
Dentro de las acciones más relevantes del plan, la ONU priorizará el análisis de la situación de las mujeres en Colombia y las brechas de género que enfrentan para activar acciones que permitan cerrarlas. Asimismo, este 8 de marzo iniciará una campaña bajo el lema “Por y para todas las mujeres y niñas” que tendrá un foco especial en vincular a la juventud y en llevar a cabo acciones para la movilización y el impulso directo a las redes y organizaciones de mujeres, contribuyendo así a que Colombia avance en el logro de la igualdad de género.
El plan propone conmemorar de forma articulada otras fechas clave para la agenda de igualdad de género, además del 8 de marzo, se señalan el Día internacional de la Niña (octubre 11); el aniversario de la Resolución 1325 (octubre 31); y el Día internacional para la eliminación de la Violencia contra las mujeres (noviembre 25).
De otro lado, y en el contexto actual de desafíos en clave de financiación, el plan establece que se implemente un marcador de género, es decir, un porcentaje de recursos específicos a acciones que promuevan la igualdad de género, en todos los proyectos que se pongan en marcha desde las diferentes agencias, fondos y programas de Naciones Unidas.
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Otra de las prioridades será también la implementación de la política de Prevención de la Explotación y el Abuso Sexual (PEAS), para prevenir, mitigar y responder a los riesgos de conductas sexuales indebidas, así como conferir la máxima prioridad a proteger a las víctimas y velar por sus derechos y su dignidad. Estas políticas son de obligatorio cumplimiento para el personal de Naciones Unidas, ONG asociadas y todas las personas que participan en la prestación de asistencia humanitaria o desarrollo.