Cápsula

La hidratación laboral se consolida como eje de bienestar y productividad en las empresas

Nuevas regulaciones y modelos de gestión del agua están cambiando la forma en que las compañías colombianas abordan el consumo hídrico y el bienestar de sus empleados.

GoogleSiga las noticias de SEMANA en Google Discover y manténgase informado

21 de octubre de 2025, 5:06 p. m.
Hidratación en entornos laborales
Hidratación en entornos laborales | Foto: Getty Images

En el entorno corporativo actual, la hidratación ha pasado de ser un beneficio complementario a convertirse en un componente estratégico del bienestar y la productividad. Diversas investigaciones advierten que una deshidratación leve puede disminuir la concentración en un 25 %, aumentar la fatiga y elevar el ausentismo.

“Las empresas que no garantizan una adecuada hidratación asumen costos ocultos que muchas veces pasan desapercibidos: menor desempeño, más incapacidades cortas y un clima laboral deteriorado. En cambio, cuando se asegura agua de calidad y acceso permanente, los resultados son inmediatos: equipos más enfocados, saludables y motivados”, asegura Felipe Roldán Uribe, gerente general de Culligan Colombia.

El ejecutivo destaca que la regulación vigente ha marcado un cambio en la gestión hídrica empresarial. Desde octubre de 2024, el Decreto 334 de la Alcaldía de Bogotá y la Resolución CRA 1005 de 2024 obligan a más de 349.000 empresas a reducir en un 10% su consumo de agua. Sin embargo, prácticas como el almacenamiento de botellones llenos generan presión adicional sobre las metas de ahorro y aumentan los costos en toda la cadena de valor.

De acuerdo con la Universidad de Michigan y la revista MDPI, producir y distribuir un litro de agua embotellada requiere entre tres y siete litros adicionales. A esto se suman gastos en transporte, almacenamiento y generación de residuos plásticos.

Una investigación de Culligan Quench revela que más del 75 % de los trabajadores no consume suficiente agua durante la jornada.

La clave está en entender que la hidratación no es solo poner un dispensador, es gestionarla como parte de una estrategia integral de bienestar y productividad”, concluye Roldán.

Noticias relacionadas