Cápsula
Cómo la tecnología biométrica podría reducir la violencia en estadios de fútbol en América Latina
El mercado global de tecnología biométrica proyecta un crecimiento de US$120.180 millones para 2030.

En menos de dos meses, Latinoamérica fue escenario de graves episodios de violencia en eventos masivos. En el Estadio Libertadores de América, más de 100 personas fueron detenidas y decenas resultaron heridas tras los incidentes entre las barras de Independiente y la Universidad de Chile.
Lo más grave es que los principales responsables aún no han sido judicializados, pues la Policía no ha logrado ubicar a ocho de los investigados por homicidio y lesiones graves.
Mientras tanto, en Colombia, el Movistar Arena vivió un caos similar cuando, nuevamente, barras bravas violentaron los accesos, ingresaron sin boleta y muchos portando cuchillos y objetos contundentes. El saldo, según la Policía Nacional, fue de cinco personas heridas.
En ese sentido, para muchos expertos, la respuesta está en el desarrollo y aplicación de tecnologías de verificación digital de identidad, una solución que combina biometría, inteligencia artificial (IA) y análisis de datos en tiempo real.

Sobre el tema David Rojas, CEO de Intexus, explica que la verificación de identidad, combina el reconocimiento de la persona con biometría facial o dactilar, con validación de documentos nacionales, inteligencia artificial predictiva y generativa para dar mayor seguridad y acelerar los procesos alrededor de un evento: compra de boletería, accesos, entre otros servicios.
Cabe señalar que a nivel global, el mercado de biometría fue valorado en US$58.980 millones en 2025, según la consultora Mordor Intelligence, y se prevé que alcance los US$120.180 millones para 2030, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 15,3%.
Esta expansión está impulsada por programas gubernamentales de identificación digital, la creciente tokenización de pagos y la modernización de aeropuertos, factores que incrementan la necesidad de contar con procesos de verificación de identidad ágiles y sin fricciones.
Bogotá es un caso ilustrativo, pues el hecho, posiblemente se hubiera evitado con sistemas de verificación digital de identidad integrados a la boletería, ya que los torniquetes habrían podido detectar en segundos a los barristas con antecedentes judiciales, bloquear el ingreso de quienes no tenían boleta y activar alertas silenciosas a las autoridades.