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Final de infarto en la NBA: el duelo que puede cambiarlo todo está por venir
La gran final de la NBA está posiblemente a dos partidos de definirse.
Por ahora, la ventaja en la serie la tiene Indiana Pacers, quien con su reciente victoria en el Bankers Life Fieldhouse está más cerca que nunca de coronarse campeón de la mejor liga de baloncesto del mundo.
La única vez que Indiana estuvo tan cerca fue en la recordada final del año 2000, cuando se enfrentó a los Lakers.
En aquella serie nunca tuvo la ventaja, y aunque logró ganar dos partidos, los angelinos siempre estuvieron un paso adelante.
Mientras tanto, Oklahoma City Thunder enfrenta un panorama complicado, puesto que se encuentra un juego abajo en la serie.
Aunque ha mostrado un mejor rendimiento en líneas generales, en el más reciente partido fue superado con claridad por los Pacers.
En los dos primeros encuentros, el Thunder se vio más fuerte y dominante. Sin embargo, el primer partido se les escapó en el último segundo tras una anotación épica de Tyrese Haliburton, quien se ha consolidado como un experto en cerrar partidos al límite, siendo clave en esta serie y durante toda la temporada.
Haliburton ha sido fundamental para Indiana, por otra parte la gran figura del Thunder sigue siendo Shai Gilgeous-Alexander, quien ha sido el máximo anotador de su equipo: 38 puntos en el primer partido, 34 en el segundo y 24 en el tercero.
Solo en ese último encuentro no fue el mayor anotador de Oklahoma, ya que Jalen Williams logró convertir 26 puntos.
Aunque el Thunder ha demostrado ser un equipo técnicamente superior en varios tramos, la falta de concentración en los momentos clave le ha costado caro.
Es precisamente esa solidez mental lo que ha convertido a los Pacers en los favoritos, por su resiliencia y su capacidad de no dar nada por perdido.
La única forma en que Oklahoma pueda revertir la serie es fortaleciendo el aspecto mental, aprendiendo a manejar los nervios y la adrenalina en los cierres de partido, especialmente en los últimos segundos del último cuarto.
El siguiente partido se jugará en Indiana a las 7:30 de la noche, del próximo viernes 13 de junio, y una victoria de los Pacers los dejaría a solo un paso del campeonato.
En cambio, si el Thunder gana, la serie se empataría, y tendrían la oportunidad de inclinar la balanza a su favor en casa, frente a su afición.
Se avecina el duelo más decisivo de esta final, el que podría determinar quién tomará el control absoluto de la serie y quedará con el título en sus manos en el tramo final.
