Cine

“Un western del Chicamocha, no de Leone”: reseña de la imperdible ‘Adiós al amigo’ de Iván David Gaona

La genial película mira al final de la Guerra de los Mil días para reflejar cuánto seguimos en el mismo lugar y visibilizar saberes sepultados y planos inexplorados, entreteniendo desde la aventura del séptimo arte.

Alejandro Pérez Echeverry
9 de agosto de 2025, 4:00 a. m.
La genial película mira al final de la Guerra de los Mil días. | Foto: Fla ContraBanda

En estos años de expansión para la industria cinematográfica en Colombia, el cine nacional ha navegado dos vertientes primordiales que difícilmente se han encontrado, pues parecen opuestas. Por un lado, la del cine comercial, ese que los diciembres tenía la costumbre de llenar las salas y hacer reír a la gente con un humor predecible, y su evasión de los fantasmas que como sociedad nos asustan. Por otro, la del cine de autor, con inquietudes profundas, importantes, removiendo esas sombras en la nación con apuestas no convencionales (así como una pretensión entendible de estrenarse en alguna otra latitud para conseguir más impulso, distribución y público, ojalá consiguiendo algún galardón).

En medio de ese panorama, quien evita una y otra esquina, aproximándolas a su manera, logrando algo inclasificable, consigue un logro de alto calibre. No será el primero, no será el último, pero Iván David Gaona alcanza eso en Adiós al amigo, su western del Chicamocha, una sesuda travesía de supervivencia y acción, llena de personalidad, que en su sello evoca a Kusturica y a Tarantino, pero no transa su autenticidad, esa palabra peligrosa que a veces justifica la mediocridad, pero en este caso marca excelencia.

No es una película tonta; es indudablemente atrapante. No es una clase de filosofía, pero es todo menos panda, proponiendo reflexiones y agitando. Hay bala, pero también espíritu. Además, desde el arte investigado que implicó escribirla y realizarla, la producción revisa relatos del conflicto que históricamente se han quedado incompletos, como el rol de las mujeres, de los pueblos indígenas y de las negritudes en estas geografías.

'Adiós al amigo' (2024), Iván David Gaona
Rafael Uribe Uribe y varios guardianes inesperados se cruzan en el camino de los protagonistas. | Foto: La ContraBanda

Oriundo de Güepsa, Santander (como su protagonista), nacido en 1980, Iván Gaona se graduó de ingeniero civil y luego se metió de cabeza en el cine. Desde la escuela más profunda que vivió, integrando decenas de rodajes relevantes (como el de Los viajes del viento), el director entendió el valor de hacer cine en escenarios reales, algo que hace sentir plenamente en esta producción, en la que el imponente cañón del Chicamocha se convierte casi que en una deidad.

Decir que, en la película, el cañón es muy bien aprovechado, es poco... | Foto: la ContraBanda

Su cine nace de su región. El vacío de representación que sintió de joven, viendo a otros imitando acentos como el suyo, se volvió un llamado inconsciente, según le cuenta a esta revista. “En Bogotá se han hecho novelas imitando los acentos de todas las regiones, pero nunca se sentía como algo real”, dice. “Entonces –agrega–, estar en este mundo se me justificaba contando cosas en la región”. Y si bien no fue premeditado antes, “para esta película sí pensamos: ‘Hay que tener estos actores de nuestra región; hay que localizar geográficamente el lugar’; tareas no impuestas del propio arte”.

La película imagina cuestiones en torno a lo que pudo haber sucedido en los días posteriores a la Guerra de los Mil Días. Lo hace siguiendo la historia de Alfredo Duarte Amado, un soldado que luchaba del lado liberal, que en la noticia del embarazo de la mujer de su hermano ve una razón para ir a buscarlo. Después de tanta muerte, dar la noticia de una nueva vida en camino le resultaba un motor tan limpio como era posible. Esa es la cruzada, y en ella se topa con acompañantes entrañables, cada uno con sus propias motivaciones. El más relevante, pero no el único, es un retratista, que de su padre asesinado aprendió a registrar imágenes, y quiere vengarlo. Recuerda el rostro de quien lo mató.

En el reparto predomina el talento natural santandereano. Solo hay dos actores profesionales, pero todos lo hacen de maravilla.
Benito Pardo, el retratista, es interpretado por Cristian Hernández. Willington Gordillo da vida al protagonista, el Soldado Alfredo Duarte Amado. | Foto: la ContraBanda

En su propia cruzada, la de hacer del cine, Gaona entendió muchas cosas que se hacen evidentes mientras se observa su esperado segundo largometraje, después de su celebrada ópera prima, Pariente (2016). Tiene sus códigos propios, su apuesta y la de la gente que con él trabaja es única, en el qué y el cómo.

“Es una apuesta”, le asegura a SEMANA. La lectura que hacen junto con su llave de trabajo, la productora Mónica Juanita Hernández, “es que en estas dos décadas anteriores de producción de cine colombiano, los autores y autoras tenían sus inquietudes de contexto personal, que muchas veces eran muy pesadas, política o socialmente. Y nos pareció que en esas búsquedas personales, de alguna manera, no se pensó en el público, no para acceder a sus gustos, sino para usar la dramaturgia como un elemento de emoción fuerte”.

Vale anotar también el potente efecto que tiene la banda sonora, concebida por Edson Velandia, que la eleva. Sobre esos vientos que suenan como nunca jamás sonarán, Gaona cuenta: “Buscamos una banda de cobres, de vientos, de Piedecuesta, que no son profesionales, pero tocan bien. Y su música da una textura, una imperfección perfecta, lo que necesitaba este western del Chicamocha, que no es el de Leone”.

El director explica que la idea de dicho western nació con las elecciones presidenciales que enfrentaron a Duque con Petro. “Independiente del resultado, me pareció muy fuerte la sensación de polarización de las opiniones (que se mantiene hasta ahora), en la mesa del comedor, en la propia casa. Esa sensación, y esa invitación de los medios a hablar muchas veces de manera agresiva, me fascinó en cómo trasciende a la cotidianidad”, cuenta.

Julio Valencia interpreta a Eccehomo y Salvador Bridges interpreta al Conde de Cuchicute. Son los actores profesionales del reparto. Los protagonistas vienen de la región, y qué bien lo hacen. | Foto: la ContraBanda

De ahí, Gaona empezó a mirar hacia atrás, buscando referentes históricos, y llegó rápidamente a la guerra bipartidista “que nuestros padres y abuelos vivieron”, pero no frenó ahí, siguió retrocediendo en la historia hasta llegar a la Guerra de los Mil Días: “Cuando uno es de acá, ese conflicto y Santander están siempre ligados. Uno pasa por el cañón toda la vida y todas las exposiciones históricas tienen que ver con esa guerra latente”. Por algo el aeropuerto se llama Palonegro (en honor a una de las batallas más significativas). “Todo lo que hacemos aquí tiene que ver con esa remembranza”, sentencia. Esto trasciende. La película, que también ofrece una mirada a la notable figura de Rafael Uribe Uribe, les sale a todos de las entrañas.

En perspectiva, la historia refleja una especie de loop eterno, pues dos generaciones atrás, la situación no ha cambiado en gran medida. “Para escribir este guion leí e investigué sobre la posición del Gobierno frente a la reforma agraria, y no mucho ha cambiado 100 años después. En ese tiempo, los poquitos liberales del Congreso estaban encabezados por Rafael Uribe Uribe y los conservadores defendían sus intereses, y dos generaciones después, uno dice: ‘Estamos condenados. Son los mismos apellidos, pero cambian de lado a lado’”.

Marina Olarte es Lucía, un tremendo personaje en 'Adiós al amigo'. | Foto: la ContraBanda

Lo que no cambia tampoco, afortunadamente, es el sentido de la vida y la integridad que este creador y artista imprime en sus personajes, que sus actores interpretan tan bie

n (solo hay dos profesionales en el reparto), con una enorme fotografía, arte, edición, musicalización. Esta es una producción entera, rotunda, hecha realidad cinco años después de su rodaje por gente que en la memoria ve un valor, antes que iluminado, necesario… tan necesario como lo es volver a cautivar al público.

ADIÓS AL AMIGO  - Tráiler Oficial