CONTEXTO

El oriente de Antioquia es un solo territorio

Así lo demuestra Masora, un modelo de asociatividad territorial que agrupa a nueve municipios de la región y que hoy beneficia a casi medio millón de personas.

27 de noviembre de 2017
Municipio de El Carmen de Viboral en el Oriente antioqueño.
Municipio de El Carmen de Viboral en el Oriente antioqueño. | Foto: Cortesía MiOriente.com

Guarne, El Carmen de Viboral, El Retiro, El Santuario, La Ceja del Tambo, La Unión, Marinilla, Rionegro y San Vicente Ferrer hacen parte de Masora, una entidad que, tras 25 años de trabajo, se ha consolidado como una de las asociaciones de municipios más importantes y reconocidas de Colombia.

El nivel de gestión y ejecución la convierten en un referente de asociatividad territorial. Actualmente, genera impacto sobre 430.000 habitantes, es decir, poco más del 70 por ciento de la subregión del Oriente.

La importancia de este modelo fue ratificada por Gilberto Toro Giraldo, director de la Federación Colombiana de Municipios (Fedemunicipios), en la XXIII Conferencia Interamericana de Alcaldes y Autoridades Locales en Miami: “Las asociaciones de municipios aparecen como una alternativa para mejorar el desempeño de las administraciones locales, una especie de solución inmediata para lograr mayor eficiencia”.

Desde hace cinco años, Masora es liderada por Fabio Ríos Urrea, su director ejecutivo. Durante este tiempo, este abogado, oriundo de Rionegro, ha priorizado la gestión de recursos y la formulación de proyectos de alto impacto. Aquí algunas de las acciones más importantes de esta organización.

Entidad ejemplo

Por tres años consecutivos Masora ha sido reconocida por Fedemunicipios como la primera organización de esta índole en el país. Esa experiencia ha
sido ampliamente difundida en otros departamentos y naciones. Entre algunos de los logros obtenidos por la organización se incluyen la invitación a varias misiones técnicas y académicas en los Emiratos Árabes, y acuerdos con el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife (Islas Canarias) y el gobierno chino “para retroalimentar y apoyar con asistencia técnica y recursos de inversión a la región del Oriente de Antioquia”.

Gestión de proyectos

La capacidad operativa de esta organización le ha permitido gestionar proyectos con el gobierno nacional y apalancar importantes iniciativas que generan desarrollo en el territorio.

En los últimos dos años la atención de la asociación estuvo concentrada en las vías que necesita el Oriente antioqueño. Gracias a su gestión, “esta región recibirá 11.500 millones de pesos para mejoramiento vial”. Los recursos provendrán del Sistema General de Regalías.

Esta inversión resultará histórica para el mejoramiento de la movilidad y la conectividad intermunicipal y se constituye en el más importante proyecto regional estructurado y ejecutado por una asociación de municipios en el país.

Obras de alto impacto

En 2018 entrará en funcionamiento una megaobra que conectará la ciudad de Medellín con el aeropuerto de Rionegro: el Túnel de Oriente. Un proyecto de un costo estimado en 1 billón de pesos que reducirá a la mitad el tiempo del recorrido.

Para Ríos Urrea es evidente que esta construcción dejará muchos beneficios. Pero advierte que al mismo tiempo “afectará la movilidad en el altiplano”,
puesto que las características actuales de las vías no soportarán el tráfico vehicular en algunos sectores.

En este sentido, hace un llamado a las autoridades y a los gobiernos nacional y departamental para priorizar nuevas inversiones en la construcción de dobles calzadas en los recorridos donde hoy ya se siente la disminución en el promedio de velocidad.

Por otro lado, y como parte de los compromisos adquiridos por la asociación, desde el Ministerio de Justicia se anunció el fortalecimiento del Sistema Penal Acusatorio en la región antioqueña. De acuerdo con el director ejecutivo, se construirá un nuevo centro carcelario “para la custodia, vigilancia y resocialización de internos con un espacio adecuado para el cumplimiento en lo dispuesto en el Código de Infancia y Adolescencia”.

Según el Centro de Atención Transitorio al Menor Infractor, operado por Masora, en lo corrido de 2017 se han atendido 260 casos de jóvenes transgresores. Esto ha representado una disminución en relación con el año pasado (347 casos).