CUIDADO FAMILIAR

Aldeas Infantiles SOS, una fundación que fortalece los vínculos familiares

Todos los menores de edad deberían crecer con sus padres y un entorno que garantice sus derechos. Cuando este núcleo no está presente, o falla, esta institución brinda su ayuda, su refugio y su guía.

17 de noviembre de 1900
Desde hace 50 años Aldeas Infantiles SOS se ha dedicado a la protección de los derechos de la infancia en Colombia. | Foto: Cortesía Unicef

“Para mí, crecer con el amor de una persona que me cuidara y para quien yo fuera importante, aunque no fuera parte de mi familia biológica, lo significó todo. Fue ella, mi mamá SOS, quien me enseñó a ser papá, y quien forjó en mí el carácter para salir adelante y saber que lo más importante en la vida es la familia”, dice Alejandro Quiroga, quien creció en Aldeas Infantiles SOS desde que tenía 2 años y es ahora un profesional de la salud, con dos hijos, y una mamá que lo crió, sin haberlo llevado en el vientre.

¿Seríamos los mismos si hubiéramos crecido sin nuestra familia? Esta es la pregunta eje sobre la cual centra su labor Aldeas Infantiles SOS, una organización internacional con presencia en Colombia desde hace más de 50 años, y que ha orientado sus esfuerzos al acompañamiento de la infancia y sus familias, para que los niños y niñas no pierdan el cuidado de sus padres por causas como el maltrato, el abuso o la pobreza; y para brindar una familia acogedora y amorosa a quienes, como Alejandro, perdieron el cuidado familiar.

En Colombia hay más de 100.000 niños y niñas separados de sus familias. Muchas separaciones familiares se pueden prevenir si las familias en riesgo reciben apoyo adecuado. También hay quienes podrían regresar a su familia, si se trabaja con los cuidadores y adultos referentes para resolver las causas de la separación. Para quienes el regreso a la familia no es posible, la mejor opción es encontrar un nuevo hogar para crecer. Aldeas Infantiles SOS lleva más de 70 años trabajando en el cuidado de la infancia y sus familias a nivel mundial, para que los niños y niñas crezcan con recuerdos de una infancia feliz, libres de cualquier tipo de violencia y en el calor de una familia que los ame, respete y proteja. Por tal razón, hace una apuesta por la niñez que no cuenta con una familia protectora, ofreciendo un cuidado muy similar al de una familia, evitando que crezcan en una institución, o como se le conoce comúnmente: un orfanato.

Según Ángela Rosales, directora nacional de Aldeas Infantiles SOS Colombia, “en la familia es donde aprendemos las habilidades sociales necesarias para ser adultos independientes. No tener una familia, o perderla durante la infancia, constituye un momento difícil para cada niño, y puede generar consecuencias negativas para el resto de su vida. Ofrecer la oportunidad de sentirse nuevamente querido y protegido es la acción más importante que se puede hacer para restablecer los derechos de un niño o niña”.

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Las causas de la separación son múltiples. En el país, el 30 por ciento de los niños y niñas que requieren de servicios de acogimiento tienen entre 6 y 11 años de edad, y el 46 por ciento entre 12 y 17. Las principales causas de separación familiar son el maltrato, la violencia y el abuso sexual, seguidos de situaciones de amenaza a la integridad, abandono, consumo de alcohol o sustancias psicoactivas por parte de sus progenitores, trabajo infantil, situación de calle y desnutrición.

Además, en el último año, gracias a la labor de Aldeas Infantiles SOS Colombia más de 400 niños y niñas que habían sido separados de sus hogares por las autoridades para restablecer sus derechos, fueron reintegrados a sus familias gracias a servicios implementados por esta organización. Así mismo, en los últimos tres años la organización ha brindado asistencia humanitaria en emergencias como las de Mocoa, Chocó y actualmente en la migración de la niñez venezolana que llega a Colombia, con servicios de recuperación emocional, alimentación, apoyo a padres y madres, y en el cuidado a los niños y niñas que llegan solos al país.