HISTORIA

Un homenaje en versos

El paisaje de Cundinamarca inspira a la mayoría de escritores y poetas de la región. Tres de ellos comparten lo que les inspira.

10 de septiembre de 2017
"La poesía es un instrumento para reflexionar sobre las décadas de guerra". | Foto: Istock

El poeta británico William Wordsworth, quien dedicó hermosos versos a la belleza y al poderío de la naturaleza (“¿Bajo qué arboleda construiré mi morada? ¿Qué hondo río me dará la canción de su murmullo?”) habría vivido alegremente en Cundinamarca. El entorno natural, los cóndores, los bosques, el agua, la tradición, son también los inspiradores de los versos de muchos escritores de la región.

La docente y escritora Alexandra Díaz, nacida en San Bernardo, dice que la poesía de su tierra es totalmente verde. Sus textos tienen el color de los bosques, las praderas, las montañas, y la añoranza de los años vividos aquí. Así lo cuenta en esta pieza:

Tierra de Con*

Tierra de abuelos, de sabedores,

tejen historias de tradición.

Llanuras, valles; bosques, montañas,

surten las gentes con su sabor.

Las gentes todas, son alegría, vida,

pujanza, tierra de amor,

un territorio, muchos colores,

narra su rito de luna y sol.

*Con: como tierra del cóndor

Por su parte, el licenciado en lingüística y literatura Ricardo Arias tiene un vínculo muy especial con la tierra donde nació pues hace parte de la comunidad muisca de Facatativá. Toda su familia, desde hace más de cuatro generaciones, proviene de este municipio considerado la plaza del gobierno espiritual de ese pueblo indígena. Él dice que escribir es un impulso que nace del corazón, y que la poesía es una búsqueda de identidad y una forma de rescatar el legado cultural de sus tatarabuelos (que sigue vigente a través de la tradición oral).Las últimas colecciones de poemarios de Arias, Natural Bitchiskua y Chía Nga Sue, recogen toda la memoria del territorio desde una mirada indígena mhuisqa. el cantautor argentino Claudio Bustos musicalizó su poema Seincy, un referente de la poesía de Cundinamarca su palabra indígena.

Este lingüista compiló el libro Piedra y letra, un viaje por los recuerdos de Facatativá, que realizó motivado por un interesante hallazgo: tan solo en su municipio hay cerca de 90 escritores que exaltan las historias detrás de las montañas sagradas, la flora exuberante y los relatos de los antepasados. Pero Arias también cree que la poesía es un instrumento para reflexionar sobre las décadas de guerra que ha vivido el país y crear conciencia en esta época de posconflicto. Ricardo nos regaló estos versos:

Condor

Vuelan cóndores en Cundinamarca,

Abuelos y abuelas,

Majestuosos cruzan por el aire

las historias antiguas,

Orgullosos extienden sus ruanas,

Siembran la tierra que defienden,

Con su aliento calientan nuestro espíritu

Y nos acercan al padre sol con su vuelo.

Cerramos este artículo con la escritora Carmen Chiguasuque, quien trabaja por el rescate de la tradición oral en el municipio de Chaguaní. Carmen dice que: “Es bueno resaltar la poesía porque en ella se elevan mensajes de gratitud, alabanza, amor, perdón, paz, vida y recolocación”. Dentro de poco lanzará un libro que recoge el trabajo de varios poetas de su municipio. Aquí nos deja algunas de sus palabras:

Arco iris

En tu cuerpo está tu azul

en gamas.

Oro en tu cabellera

de frutales.

Carmín, eco triunfal

por la paz.

Arco Íris tu alma flor

de Dios.