Cómo
¿Qué tan efectivo resulta usar vinagre y bicarbonato de sodio para eliminar el polvo de un ventilador?
Mantener limpio el aparato no solo prolonga su durabilidad y mejora su desempeño, sino que también evita gastos innecesarios por reparaciones.

En plena temporada de altas temperaturas, el ventilador se consolida como un aliado indispensable tanto en hogares como en oficinas. Este aparato, disponible en diversos modelos y tamaños, cumple la función de mover el aire para proporcionar frescura y confort.
No obstante, el uso continuo favorece la acumulación de polvo, pelusas y otros residuos en sus aspas y rejillas, una situación que no solo reduce su eficiencia, sino que también puede generar riesgos para la salud y la seguridad de los usuarios.
En redes sociales, uno de los trucos caseros más comentados para su limpieza ha alcanzado millones de reproducciones, prometiendo resultados sorprendentes con materiales comunes.
La técnica, difundida por perfiles como el de TikTok Pongamos a prueba, consiste en rociar el aparato con una mezcla de vinagre y bicarbonato, cubrirlo con una bolsa plástica y encenderlo durante unos segundos. Según las imágenes compartidas, el ventilador queda visiblemente limpio, aunque persisten dudas sobre si la eficacia se debe realmente a dicha combinación.
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El químico y divulgador científico Vladimir Sánchez (@breakingvlad), reconocido por desmontar creencias virales con base en evidencia, analizó el procedimiento y expuso la verdadera razón del resultado. Aunque confirmó que la limpieza es real, indicó que el vinagre y el bicarbonato tienen un papel mínimo en el proceso.
“Al humedecer el polvo acumulado, incluso solo con agua, este se vuelve más espeso y pegajoso”, explicó en un video publicado en sus redes sociales. Posteriormente, al cubrir el ventilador con una bolsa y ponerlo en funcionamiento, se genera una presión interna que desplaza ese polvo humedecido hacia el plástico, lo que facilita retirarlo de las zonas más difíciles de alcanzar.
El divulgador también observó un detalle revelador: en la grabación original, la mezcla utilizada presenta un tono azul, diferente al que produce la combinación habitual de vinagre y bicarbonato, lo que sugiere la presencia de otros componentes. Subrayó que el efecto se explica por un principio físico —humedad, presión y circulación de aire— y no por una reacción química entre los ingredientes.

“Sí, funciona, pero no tiene nada que ver con la mezcla que están rociando”, puntualizó Sánchez, quien remarcó que el éxito del método radica en factores mecánicos más que químicos.
La aclaración evidencia cómo numerosos trucos domésticos que circulan en internet pueden ofrecer un resultado real, aunque no necesariamente por las razones que presentan los videos virales. En este caso, se trata de una limpieza efectiva, pero sin que el vinagre ni el bicarbonato resulten imprescindibles.
*Con información de Europa Press