Cómo
Oración para poner los sueños y la felicidad en las manos de Dios
Al expresar sus deseos mediante la oración, las personas sienten que están poniendo su futuro en manos de un ser superior.

La oración es para muchas personas la mejor forma de conexión con Dios. Los creyentes oran por sus sueños y su felicidad porque buscan una conexión espiritual que les brinde esperanza, dirección y consuelo.
Al expresar sus deseos mediante la oración, las personas sienten que están poniendo su futuro en manos de un ser superior, lo cual les da sentido y propósito, especialmente cuando enfrentan incertidumbre o desafíos en el logro de sus metas y propósitos.
Además, orar puede ser una manera de reafirmar el compromiso con los propios sueños, funcionando como una forma de visualización. Al pedir felicidad o realización personal, los individuos no solo buscan recibir ayuda externa, sino también encontrar fuerza interior, claridad y paz mental.

La oración, entonces, puede ser tanto un acto de fe como una herramienta para cultivar la resiliencia, la gratitud y el optimismo necesarios para seguir avanzando. Esta es una forma de orar con este propósito.
Lo más leído
Oración para poner los sueños y la felicidad en las manos de Dios
Amado Dios, hoy me acerco hasta Ti, con ilusión y devoción a darte gracias por el maravilloso regalo de la vida y porque Tú cada día me das todo e incluso más de lo que necesito. Es maravilloso ser tu hijo y avanzar con la esperanza y la confianza que solo da tu compañía.
Señor, yo confío en Ti y en tu bondad, y por eso hoy elevo al cielo una petición muy especial que nace desde lo más profundo de mi corazón: por favor tómame de la mano y muéstrame el camino hacia días más felices.
En mi vida he tenido momentos buenos y momentos difíciles, y por todo te doy gracias. Pero en este día te pido que me ayudes a conseguir la dicha y la prosperidad que intento alcanzar a base de constancia y dedicación.
Por favor no me desampares, derrama tu bendición sobre senda y guía mis pasos por caminos colmados de éxito y felicidad.

Padre amoroso, Tú mejor que nadie conoces mis anhelos, mis preocupaciones y mis necesidades. Por favor sáname si en mi cuerpo hay enfermedad, dame sabiduría para superar los problemas económicos y valor para no dejarme derrotar por las adversidades.
En este día te pido que me abraces con tu amor y me cubras con tu manto, que me ayudes a levantarme si he caído y que si me encuentro cansado seas Tú tomándome de la mano, dándome valor y conduciéndome hacia hermosos campos con ríos de agua de vida en los que pueda saciar mi sed.
Amado Dios, gracias por escuchar mi oración. De mi parte, yo avanzaré con fe, alegría e ilusión, porque sé que lo que Tú tienes preparado para mí es mucho más grande que todo lo que yo alguna vez te he pedido. Te amo Señor, que se haga siempre tu voluntad en mi vida, Amén.