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Guía práctica para el cuidado de la piel después de exponerse al sol por mucho tiempo

Aunque lo ideal es evitar las quemaduras solares, experta comparte algunos consejos útiles para saber cómo tratarlas y minimizar los daños en la piel.

24 de agosto de 2025, 12:42 p. m.
Cuidado de la piel
Mujer aplicándose protector solar y productos para el cuidado de la piel para protegerse de los rayos UV | Foto: Getty Images

Si bien es cierto que la piel necesita de la luz solar para fabricar la vitamina D, que es importante para la formación normal de los huesos, en algunas ocasiones, los rayos ultravioleta pueden ser perjudiciales para la salud de la misma, principalmente cuando la exposición es directa o prolongada.

Una inadecuada exposición solar puede quemar la piel y, en consecuencia, reducir su elasticidad y causar que una persona envejezca prematuramente, explica el portal especializado MedlinePlus, tal como lo señalan los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).

“Cuanto más se expone al sol, antes envejece su piel”, dice el Dr. Barnett S. Kramer, experto en prevención del cáncer en los Institutos Nacionales de la Salud, citado en un artículo que hace referencia al “lado oscuro” de la exposición al sol.

Lo peor que puede pasar al exponerse demasiado al sol es aumentar el riesgo de cáncer de piel, el tipo de cáncer más común en los Estados Unidos, ya que cuando la luz UV ingresa a las células de la piel puede dañar el material genético (denominado ADN) que se encuentra en su interior.

Por eso, aunque lo ideal es evitar las quemaduras solares, Ana Santamarina, experta en dermocosmética y formulación citada por la revista Mujer Hoy, comparte algunos consejos útiles para saber cómo tratarlas en caso de presentarlas y así minimizar los daños en la piel.

El ARN, descubierto como clave en las quemaduras solares, podría cambiar el enfoque de la ciencia sobre la radiación UV y su impacto en la piel.
Las quemaduras solares pueden causar un dolor considerable, pero varios remedios caseros ofrecen alivio. | Foto: Getty Images

En primer lugar, la especialista aconseja comenzar con una compresa fría para bajar la inflamación. Después, indica que lo mejor es aplicar un bálsamo reparador con óxido de zinc, preferiblemente que incluya pantenol al 5 % o centella asiática, para crear “una barrera protectora sobre la piel irritada” que calme, repare y actúe como ligero antiséptico.

Por otro lado, insiste en la necesidad de no desprender la piel muerta porque puede dañar la piel nueva. Esta práctica, aunque resulta tentadora y parece inofensiva, realmente puede provocar microlesiones que aumentan el riesgo de infección o de aparición de manchas, explica.

Este proceso de cuidado debe repetirse varias veces al día hasta aliviar por completo la piel, evitando exfoliantes o ingredientes irritantes como mentol o alcanfor y, en su lugar, seguir usando protección solar.

De igual manera, Santamarina recomienda optar por ropa con protección UPF y, especialmente, evitar la exposición solar directa durante varios días.

Si las quemaduras son más serias, con ampollas o sensación de fiebre, Rosa Roselló, directora de formación de Druni, recomienda ponerse en contacto con un profesional para conocer el tratamiento adecuado.

“Si la quemadura es más grave y aparecen ampollas, recomiendo consultar a un médico que pueda recetar un tratamiento con corticoides para promover la regeneración celular. Dependiendo de la gravedad de la quemadura, tardará más o menos en desaparecer y puede dejar marcas oscuras o incluso cicatrices”, advierte.