El truco casero con vinagre para quitar el óxido de cualquier metal

Al vinagre blanco se le dan diversos usos en el hogar. Es uno de los productos aliados de la limpieza, igual que el bicarbonato. Se caracteriza por ser un elemento ideal para desinfectar, quitar malos olores, eliminar bacterias y hasta hongos de diferentes espacios en la casa.

Es un producto elaborado a partir de la fermentación del alcohol puro de caña de azúcar, maíz o malta y se dice que una de sus principales bondades en el hogar es que ayuda a eliminar el óxido de todo tipo de metal. Para cumplir con este objetivo solo se tiene que llenar un recipiente con vinagre blanco y sumergir en él el objeto que tiene el óxido. Al cabo de dos días, el óxido se debilitará, por lo que podrá eliminarse de manera sencilla del objeto en el que está impregnado, según el portal Mejor con Salud.

El portal Cleanipedia indica que cuando se trata de superficies más grandes, la recomendación es usar una buena cantidad de vinagre y dejar que actúe por varias horas, lo que facilitará que el óxido de desprenda.

Otras opciones para superar esta situación son con limón y sal y, con bicarbonato. En el primer caso lo que se debe hacer es cubrir el metal con sal y por encima exprimirle varios limones. Mientras más jugo de esta fruta cítrica se le ponga, mejor. Lo aconsejable es dejar que estos dos productos actúen por varias horas y después, con un cepillo, se quita el óxido de la superficie. Una alternativa más es el bicarbonato de sodio. Para ello se forma una pasta con este ingrediente y agua, se esparce sobre la zona oxidada y se deja que actúe por unos minutos. Con un cepillo se retira la mezcla y el óxido se desprenderá de manera más fácil.

Otros usos del vinagre

Como ya se mencionó, el vinagre es multiusos. Además de ser una opción para quitar el óxido del metal, este es un producto que actúa como desinfectante natural y por ello se puede utilizar en cualquier superficie de la casa como los pisos, azulejos y cristales.

El vinagre blanco también es una buena alternativa para acabar con bacterias, hongos, moho y otro tipo de organismos que pueden provocar suciedad y malos olores. Por ejemplo, es muy útil para la desinfección y limpieza de las tablas de cortar alimentos, especialmente si son de madera.

Este producto junto al bicarbonato de sodio, es un potente desatascador de desagües. Además de desobstruir el bloqueo, eliminará los malos olores que se puedan generar en las tuberías, bañeras, duchas o el fregadero de la cocina.

Por último, sirve para eliminar malos olores del microondas. Para solucionar estos problemas solo se tiene que poner medio vaso de agua mezclado con cinco cucharadas de vinagre blanco, y meterlo en el microondas durante un minuto. El vapor que desprende permitirá retirar en menos de 10 segundos todas las impuerezas y alejar el mal olor.