Bienestar Y Nutrición

¿Puede un diabético tomar cerveza?

Es fundamental recordar que no solo los carbohidratos y el azúcar pueden influir en el control de la diabetes

Cerveza
La ingesta de alcohol puede ocasionar diversos efectos en el organismo. | Foto: Getty Images/iStockphoto

El manejo de la diabetes es un desafío constante, que requiere atención meticulosa a la dieta, el ejercicio y la regulación de los niveles de azúcar en la sangre. Una de las preocupaciones comunes entre las personas con diabetes es cómo el consumo de alcohol, en particular la cerveza, puede influir en su condición. A menudo, surgen preguntas como ¿Puede un diabético tomar cerveza de manera segura?

La diabetes es una enfermedad crónica que afecta la producción o función de la insulina, una hormona vital para regular los niveles de azúcar en la sangre. El alcohol, en general, puede impactar estos niveles de manera significativa, dependiendo del tipo y la cantidad de bebida consumida, así como de factores individuales.

Vino y cerveza
Vino y cerveza | Foto: Getty Images/iStockphoto

El papel de los carbohidratos en la cerveza

La cerveza es una bebida alcohólica elaborada principalmente a partir de granos, como la cebada. Tal como lo indica el portal Healtline, esto significa que contiene carbohidratos, que son uno de los principales factores a considerar para las personas con diabetes. Los carbohidratos se convierten en azúcar en el cuerpo, lo que puede elevar los niveles de glucosa en la sangre.

Sin embargo, no todas las cervezas son iguales en términos de contenido de carbohidratos. Existen opciones de cervezas bajas en carbohidratos que pueden ser más adecuadas para las personas con diabetes. Estas cervezas han ganado popularidad en los últimos años y, por lo general, contienen menos calorías y carbohidratos que las cervezas regulares. Ejemplos de cervezas bajas en carbohidratos populares incluyen Miller Lite, Coors Light, Bud Lite y Busch.

Vino tinto: una alternativa beneficiosa

El vino tinto, en particular, ha recibido atención positiva en relación con la diabetes. De acuerdo con Vinetur, este vino es conocido por su alto contenido de antioxidantes y su potencial para mejorar los marcadores de enfermedades cardíacas. Además, los estudios sugieren que el consumo moderado de vino tinto puede ayudar a reducir el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes, como la retinopatía diabética, que afecta los vasos sanguíneos en los ojos. El contenido de carbohidratos del vino tinto es relativamente bajo, con solo 3.8 gramos por una porción estándar de 5 onzas.

¿Qué vino se puede tomar para bajar de peso?
¿Qué vino se puede tomar para bajar de peso? | Foto: Getty Images

Licores destilados: cuidado con la hipoglucemia

Los licores destilados, como ginebra, ron, vodka y whisky, contienen muy pocos o ningún carbohidrato por porción. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que el alcohol puede influir en los niveles de azúcar en la sangre, lo que puede llevar a la hipoglucemia, niveles peligrosamente bajos de azúcar en la sangre. Esto se debe a que el hígado no puede mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre mientras metaboliza el alcohol, lo que puede aumentar el riesgo de hipoglucemia.

Por lo tanto, es esencial que las personas con diabetes tengan precaución al consumir licores destilados. Además, el portal de Mayo Clinic, indica que es importante evitar mezclar estos licores con jugos azucarados o sodas con contenido de azúcar, ya que esto podría resultar en un aumento inicial de azúcar en la sangre seguido de una caída brusca.

Cócteles bajos en carbohidratos:

Para aquellos que disfrutan de cócteles, existen opciones más saludables que otros. Los cócteles bajos en carbohidratos, como el Martini, el vodka con soda y el Bloody Mary, pueden ser alternativas adecuadas para las personas con diabetes. Estas bebidas, cuando se preparan adecuadamente, contienen menos carbohidratos y azúcares añadidos.

El Martini, por ejemplo, tal como lo explica el portal Healtline, se prepara mezclando ginebra o vodka con vermú seco en una proporción de 2 a 1 y no contiene jugos ni mezcladores azucarados. El vodka con soda, al igual que su nombre indica, combina vodka con club soda, lo que significa que no contiene carbohidratos, siempre que se use soda o agua mineral. El Bloody Mary, elaborado con vodka, jugo de tomate y varias salsas y especias, también puede ser una opción saludable debido a su contenido de licopeno, un antioxidante que puede ser beneficioso para las personas con diabetes.

El Martini se prepara mezclando ginebra o vodka con vermú seco en una proporción de 2 a 1 y no contiene jugos ni mezcladores azucarados. | Foto: cocina semana

Bebidas que deben evitarse

A pesar de las opciones adecuadas para personas con diabetes mencionadas anteriormente, existen bebidas que deben evitarse en general. Según el portal Diabetes Education Onlilne, los cócteles tradicionales, como las margaritas, piñas coladas y daiquiris, suelen contener altos niveles de azúcar, lo que puede elevar los niveles de azúcar en la sangre de manera significativa. Los vinos de postre, como el vermut, el oporto y el jerez, también son ricos en carbohidratos y azúcar. Del mismo modo, los licores de crema, como Bailey’s Irish Cream y Kahlua, son particularmente altos en azúcar.

Además de seleccionar con cuidado las bebidas, las personas con diabetes deben seguir algunas pautas generales al consumir alcohol:

  • Comer antes de beber para evitar hacerlo con el estómago vacío.
  • Evitar beber si los niveles de azúcar en la sangre están bajos.
  • Monitorear regularmente los niveles de azúcar en la sangre antes, durante y después de beber.

Las personas con diabetes pueden disfrutar de cerveza y otras bebidas alcohólicas con moderación y tomando precauciones. Es fundamental recordar que no solo los carbohidratos y el azúcar pueden influir en el control de la diabetes, sino también el alcohol en sí. Por lo tanto, es esencial hablar con un profesional de la salud antes de consumir alcohol si se están tomando medicamentos para la diabetes, ya que el alcohol puede aumentar el riesgo de hipoglucemia. Cada caso es único, y la moderación y la responsabilidad son clave para garantizar la seguridad de quienes viven con diabetes.