Descifrando la personalidad a través de la firma, ¿qué revela sobre cada persona?

Se ha observado que las firmas nunca son idénticas entre sí. Esto se debe a que al momento de firmar, aunque se repitan los mismos trazos, el cerebro envía señales a la mano que reflejan el estado de ánimo del individuo en ese momento. Por lo tanto, una firma hecha después de un contratiempo será diferente de aquella realizada al suscribir un contrato.

La firma es considerada una forma de identificación única creada por cada individuo. En su diseño, puede contener un componente inconsciente, ya que suele modificarse con el tiempo hasta lograr realizarse en pocos segundos sin necesidad de pensarlo, según lo mencionado en el portal Bioguía.

Este elemento se compone de gestos o trazos habituales y automatizados, elegidos libremente por la persona, y plasma una estilización de la autoimagen del individuo. La experta en Comunicación, Érika García, citada por el portal ‘DineroEnImagen’, describe la firma como una autorrepresentación y expresión del núcleo más íntimo, privado y genuino de la personalidad, reflejando el nivel de autoaceptación y sentimiento de sí mismo.

La grafología se dedica al análisis de la firma, y un grafólogo puede proporcionar información relevante sobre el individuo a partir de ella. Sin embargo, hay aspectos básicos y generales que cualquier persona puede observar por sí misma si desea tener una visión general.

El portal ‘Bioguía’ sugiere un ejercicio para descubrir aspectos de la personalidad relacionados con la firma.

La firma revela la personalidad

Cuando se dispone de una hoja amplia, la ubicación elegida para firmar puede proporcionar una visión general de la personalidad de alguien.

Aquellos que firman en la esquina superior izquierda suelen ser personas introvertidas y reservadas. En cambio, quienes firman en el centro del margen superior suelen ser personas equilibradas y cautelosas. Por otro lado, aquellos que firman en la esquina superior derecha tienden a ser personas amables y tranquilas.

Las personas que firman en el centro de la hoja por completo tienden a ser distantes y observadoras, mientras que aquellas que lo hacen en el centro a la izquierda suelen ser igualmente reservadas.

En cambio, si alguien firma en el centro a la derecha, esto sugiere que son amables y extrovertidas; y si la firma se encuentra en la esquina inferior derecha, es probable que sean personas abiertas, amables y espontáneas. Por último, la esquina inferior izquierda corresponde a individuos más distantes y cerrados en su comportamiento.

Tamaño

El tamaño de la firma puede revelar aspectos de la personalidad de una persona. Una firma más grande sugiere una tendencia hacia la extroversión, mientras que una firma más pequeña podría indicar lo contrario, es decir, una personalidad más introvertida. Sin embargo, también es posible que una firma grande refleje a alguien que necesita llamar la atención y mostrar seguridad, pero que en realidad es tímido e inseguro.

En general, se considera que un tamaño normal de firma está en el rango de 12 a 18 milímetros.

Legibilidad

“Si una firma es fácilmente legible, es decir, se puede entender completamente el nombre, esto indica que el individuo muestra sinceridad y franqueza a los demás”, así lo dio a conocer el portal altonivel.com.mx.

Por el contrario, si una firma es ilegible, se asocia a personas más desconfiadas que pueden tener cierta resistencia a la autoridad o que suelen ser desconfiadas en general.

En el caso de una firma semilegible, como cuando solo se entienden las iniciales o el nombre, pero no el apellido, esto representa a una persona que se toma su tiempo antes de otorgar su confianza a los demás.

Inclinación

La orientación de la firma puede transmitir distintos aspectos de la personalidad de una persona. Si la firma se inclina hacia arriba, representa su nivel de autoexigencia. Una inclinación leve hacia arriba sugiere un deseo de crecer y superarse, mientras que una inclinación muy pronunciada puede indicar una autoexigencia excesiva.

Por otro lado, una firma inclinada hacia abajo indica apatía y resignación. La inclinación más pronunciada refleja una actitud aún más profunda de desinterés o falta de motivación.

En cambio, una firma que se presenta de forma horizontal revela una personalidad equilibrada, alguien que acepta tanto sus aciertos como errores sin extremos de autoexigencia o apatía.

Forma

La predominancia de líneas curvas en la firma refleja gustos estéticos, amabilidad y buenos modales por parte de la persona.

En contraste, si predominan las líneas rectas y angulosas, indica un enfoque más pragmático, ordenado y disciplinado.

En la firma, el uso más frecuente del nombre propio representa el mundo personal e íntimo del individuo, mientras que el apellido representa a la familia. Por lo tanto, la mayor presencia de uno u otro (ya sea el nombre completo o sus iniciales) indica qué aspecto se valora más.

Si el nombre está ausente en la firma, sugiere que la persona otorga una gran importancia a la familia y al entorno, ocultando su propia identidad detrás de ellos. En cambio, si solo aparece el nombre propio en la firma, indica a una persona muy independiente y posiblemente distante de sentirse representada por su familia.