coronavirus

¿Por qué no importa qué vacuna recibirá?

Un experto en informática y salud pública explica que, a pesar de las diferencias en efectividad de las vacunas disponibles en Colombia, no existe una mejor que otra. Lo ideal es recibir la que le den. Estos son sus argumentos.

1 de marzo de 2021
Primer día Jornada de vacunación contra Covid19 al  personal medico de primera linea
Los expertos llaman la atención del público para que no se detengan en temas como la marca de la vacuna. Lo importante ahora, dicen, es estar inmunizado. | Foto: ESTEBAN VEGA LA ROTTA

Hace un año todos clamaban por una vacuna; hoy, el mundo cuenta no solo con una sino con por lo menos cinco de ellas, que hoy son la esperanza para controlar la pandemia. La última en aparecer es la de Johnson y Johnson, aprobada el viernes pasado por un panel de la FDA para uso de emergencia. Esta vacuna tiene grandes ventajas, entre las cuales sobresale que solo requiere de una dosis y que su administración es más fácil. Con ésta el mundo ya cuenta con un arsenal en el que figuran también las vacunas de Pfizer, Moderna, Sinovac y la rusa, Sputnik V.

Las cajas que contienen la vacuna rusa Sputnik V se descargan en San Marino, una ciudad estado rodeada por Italia. (Andrea Costa / IssRSMarino vía AP)
La vacuna rusa Sputnik V es otra de las que se encuentra en el arsenal para controlar la pandemia. (Andrea Costa / IssRSMarino vía AP) | Foto: AP

A pesar de que todas han sido aprobadas en Estados Unidos para proteger a la gente del covid-19, cada una de ellas es diferente de la otra y, de hecho, algunas son más efectivas. Por ejemplo, los datos suministrados por Johnson & Johnson muestran que su vacuna es 66 por ciento más efectiva para prevenir los casos moderados y severos, y tuvo 72 por ciento de eficacia total en Estados Unidos. Eso es menos comparado con los datos de Moderna y Pfizer-BioNTech, que muestran efectividad mas arriba de 90 por ciento en covid simtomático.

Aunque es lógico que la gente quiera tener en su cuerpo la mejor, el problema actual es que no hay suficientes dosis de esas mejores para vacunar a todo el mundo. En este caso muchos se preguntan qué hacer. La respuesta es que nadie deberia rechazar una vacuna de las que está disponible, sin importantar su nivel de efectividad. Eso piensa Bruce Y. Lee, director del Public Health Informatics, Computational and Operations Research, un grupo de investigación de salud y también profesor de salud y política publica en City University of New York (CUNY).

Para él la evidencia que muestran sus cálculos es que las personas deberian recibir la vacuna que les ofrezca sin titubeos. Hay dos razones para vacunarse con cualquiera de los medicamentos ya desarrollados. La primera es que entre más gente vacunada haya se prodrán salvar más vidas. Para una persona específica una vacuna menos efectiva aún proveerá protección sustancial contra el covid severo. “Mientras más gente vacunada haya será mejor que esperar a tener una vacuna de mayor efectividad”.

En un editorial de su autoría publicado en el diario The New York Times, Lee relató que desarrolló un modelo de simulación que analiza lo que pasaría en Estados Unidos con la aplicación simultánea de vacunas de diferentes niveles de eficacia. En el trabajo que se publicó en The American Journal of Preventive Medicine, en la mayoría de casos las vacunas que se aplicaron más rapido aunque con una menos eficacia previnieron más casos de covid 19, hospitalizaciones y muertes, comparado con esperar meses para la llegada de las más eficaces.

“Considere este ejemplo”, dice el experto, “digamos que en Estados Unidos se vacunan un millón de personas en un día con una vacuna 90 por ciento eficaz y continuan este proceso hasta alcanzar el 60 por ciento de la población. Eso tomaría seis meses y medio”.

En el otro scenario, es decir, con vacunas de menos eficacia se prevendría en promedio más de 1.38 millones de casos adicionales y 51.000 más hosptalizaciones y más de 6.000 muertes se evitarían que en el escenario descrito arriba. “Esto subraya la importancia de lograr que más gente se vacune tan pronto como sea posible para disminuir la velocidad de propagación del virus.

Además, dice Lee, las cifras de efectividad apenas son una medida del beneficio de una vacuna, pero hay otros tipos de ventajas. Por ejemplo, se ha logrado establecer que la vacuna Johnson & Johnson tiene un 86 por ciento de efectividad para prevenir la Covid-19 grave en los Estados Unidos y un 100 por ciento de eficacia con relación a la hospitalización y la muerte, lo que reducirá la presión de la demanda en los hospitales. La vacuna Johnson & Johnson también requiere solo una dosis y temperaturas de refrigeración regulares para su almacenamiento, lo que significa que puede ser más fácil de distribuir.

La lucha contra el coronavirus.
Esta foto del 2 de diciembre de 2020 proporcionada por Johnson & Johnson muestra frascos de la vacuna Janssen COVID-19 en Estados Unidos. La vacuna de dosis única de Johnson & Johnson protege contra COVID-19, según un análisis realizado por los reguladores de EE. UU. REcientemente los científicos de la Administración de Alimentos y Medicamentos confirmaron que, en general, tiene una efectividad de alrededor del 66 por ciento y también dijeron que la inyección de J&J, una que podría ayudar a acelerar las vacunas al requerir solo una dosis en lugar de dos, es segura de usar. Foto: Johnson & Johnson vía AP. | Foto: AP

Por último, dice que es posible que esta no sea la única vez que la gente reciba la vacuna contra la Covid-19. Teniendo en cuenta que es posible que estas vacunas no ofrezcan protección de por vida, especialmente si continúan surgiendo nuevas variantes, se necesitarán dosis adicionales para reforzar la inmunidad. En conclusión, señala Lee, “recibir cualquiera de las vacunas aprobadas cuando sea su turno es importante, no solo para protegerse, sino para ayudar a que la vida vuelva a la normalidad para todas las personas”.