Álvaro Uribe y su petición en el Eje Cafetero: “Ayúdenos a ganar las elecciones en el 2026; no les quedaremos mal”

El expresidente Álvaro Uribe ya está en campaña. No lo oculta. Y su interés por las elecciones presidenciales del 2026 es evidente.

El líder del Centro Democrático tiene cinco precandidatos del Centro Democrático (Paola Holguín, María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Miguel Uribe y Andrés Guerra) y ha sido claro en la necesidad de recuperar el poder de la Casa de Nariño en 2026 y no permitir democráticamente que un candidato de izquierda —o el sugerido por Gustavo Petro— permanezca otros cuatro años. Él ha criticado fuertemente las reformas a la salud, tributaria, pensional y laboral, además de los problemas económicos y seguridad que enfrenta Colombia.

Este sábado 8 de marzo, desde Armenia, en el Eje Cafetero, Uribe habló de frente a las decenas de ciudadanos que llegaron hasta un sitio público a escucharlo.

“¿A qué vengo al Quindío? ¿A qué viene este partido? Yo vengo al Quindío, a este pedacito de cielo que Dios nos dio, a reverdecer un amor que me había afectado. Los quiero mucho”, expresó el exmandatario, mientras el público lo aplaudía.

Y añadió en tono poético: “Este cucho tiene un corazón sensible, como esta juventud. Y ese corazón sensible quiere reverdecer el amor de esta tierra”.

Y siguió: “¿A qué viene este partido? Esta colectividad es una escuela itinerante de líderes, venimos a escuchar cinco excelentes precandidatas y precandidatos a la presidencia. Humildemente, los acompaño para decirles a ustedes: ‘Ayúdenos a ganar las elecciones del 2026 en la presidencia, en el Congreso. Nosotros no les quedamos mal, queridos ciudadanos’”.

“¿Para qué queremos que gobierne el Centro Democrático y tenga una mayoría en el Congreso? Para tener un país seguro, sin microtráfico, sin esta violencia, para tener a una Colombia con emprendimiento, un país de políticas sociales, un Estado pequeño, transparente, sin mermelada. ¿Para qué queremos que este partido gane? Para reducir toda esa burocracia que no sirve, derrochadora de los dineros del Estado y para poder avanzar en política social”, propuso.

Por último, el expresidente lanzó una iniciativa. “Palabra de gallero, este partido se compromete, si podemos ganar, a bajar los impuestos”.

Uribe mezcla su tiempo libre en recorrer el país. El resto lo dedica a preparar su defensa en el juicio penal en su contra por la supuesta manipulación de falsos testigos, cuya suerte podría definirse en los próximos meses.

Durante su discurso, Uribe cuestionó fuertemente la reforma a la salud que aprobó esta semana la plenaria de la Cámara y dijo que el gobierno de Gustavo Petro “destruyó el sistema de salud para desacreditarlo e imponer el nuevo”.

Y puso varios ejemplos sobre lo que les espera a los colombianos si la reforma la aprueba la Comisión Séptima y la plenaria del Senado.

Habló de la estatización de la salud y les recordó a los ciudadanos que ahora pueden pelear con la empresa privada y pública por las deficiencias en el sistema, pero después de aprobada la iniciativa, la salud del país quedará en manos del Estado y no habrá a quién reclamarle.