Nación
Alerta en Cali: estudiantes han dejado de asistir a clases y se están retirando por amenazas de pandillas
Las intimidaciones están ocurriendo en el oriente de esta ciudad.
Estudiantes de la Institución Etnoeducativa Monseñor Ramón Arcila, ubicada en el barrio Marroquín, oriente de Cali, han dejado de asistir a sus jornadas escolares debido a las amenazas que están sufriendo por parte de pandillas. Algunos han optado, incluso, por retirarse del colegio.
“Esta problemática de violencia afecta directamente a nuestros estudiantes y sus familias, lo que ha llevado a la institución a estar en máxima alerta”, advierte la institución en una carta enviada a la Secretaría de Educación de Cali, en la que solicita tomar medidas que permitan a los estudiantes regresar a sus clases.
Según la institución afectada, aproximadamente 15 estudiantes no han regresado a clases y otros 9 tomaron la decisión de hacer definitivo su retiro. Las amenazas, alega la institución, provienen de una oleada de violencia desatada por enfrentamientos de pandillas, en buena medida, por las denominadas fronteras invisibles.
“Documentar la situación de amenaza en la institución se dificulta debido a que los acudientes solo manifiestan la situación de manera verbal y se niegan a radicar documento escrito sobre los hechos o radicar denuncias ante las autoridades competentes”, expone.
Tendencias
En vista de la compleja situación de seguridad que enfrentan los estudiantes del colegio, la institución pidió al cuadrante de la Policía se haga presente en los horarios de ingreso y salida, y concertar estrategias para evitar el porte de armas y sustancias estupefacientes dentro del colegio.
Asimismo, adelantar mesas de diálogo con quienes están emitiendo las amenazas contra los estudiantes “para que se generen unos pactos de paz o se excluya a los alumnos de los conflictos entre pandillas”, e implementar programas deportivos y culturales para que los jóvenes ocupen sus tiempos libres.
La institución pidió, además, una reunión en la que se hagan presentes representantes de las secretarías de Seguridad y Justicia, y Educación, la Personería y la Policía Metropolitana.
A los secretarios @Dranguet de @SeguridadCali @darwinlenis de @Educacion_Cali y @PoliciaCali les pido proteger la vida de los estudiantes de la I.E. Monseñor Arcila en Marroquín.
— Roberto Ortiz (@robertoortizu) April 28, 2023
Más de 20 alumnos han sido amenazados, de estos 15 no fueron a estudiar durante la semana y otros 9… pic.twitter.com/Y751P1Lfvf
El concejal Roberto Ortiz repudió las amenazas sufridas por los alumnos e instó a las autoridades a hacerse cargo de la situación. “Estoy sumamente preocupado por esta información. Sus directivas pidieron apoyo para que se proteja la integridad de los alumnos por las amenazas de las pandillas del sector. Hay un entorno muy violento por las fronteras invisibles. Han resultado intimidados hasta los padres de familias. Por favor, no descuiden las peticiones que hace la institución. No puede haber más jóvenes víctimas de la violencia en nuestra ciudad”, aseguró.
Y es que Cali sigue conmocionada por el asesinato de la estudiante Deisy Flórez, menor de edad, perpetrado este jueves 27 de abril en el barrio Meléndez, sur de esta ciudad.
La joven, quien vestía su uniforme escolar, pues acababa de terminar su jornada escolar, iba saliendo de Instituto José María Cabal cuando el asesino la interceptó y le quitó la vida. El hombre huyó con rumbo desconocido.
La menor de edad quedó tendida en el piso ante la mirada de varias personas que pasaban por el lugar. La víctima tenía 17 años.
De acuerdo con Dranguet, el proceso de identificación del homicida va por buen camino. “Tenemos videos de unas cámaras con los que podremos establecer quién es el responsable de este vil asesinato”, dijo el funcionario.
Pese a esto, el secretario confirmó el ofrecimiento de una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que conduzca al paradero del asesino.
“Hago un llamado a los caleños para que nos unamos para esclarecer rápidamente este hecho, por eso ofrecemos esta recompensa”, añadió Dranguet.
Siguiendo lo dicho por el funcionario, el hombre que perpetró el homicidio habría sido un sicario contratado por otra persona. Por eso las autoridades también buscan al autor intelectual del crimen.
La comuna 18, donde fue asesinada la estudiante, es una de las más golpeadas por los homicidios en lo corrido de este año, durante el cual se han registrado 330 homicidios en toda la ciudad, es decir, seis más que el año pasado. 21 víctimas eran mujeres.