Nicolás Alcocer y el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, podrían ser vinculados a indagación de la Procuraduría por caso de la Hidroeléctrica de Urrá

Un nuevo escándalo sacudió este miércoles a Ecopetrol. Esto luego que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla radicara una denuncia en contra del presidente de la empresa petrolera, Ricardo Roa Barragán y Nicolás Alcocer, hijo de la primera Dama, Verónica Alcocer, por las presuntas irregularidades que se habrían presentado en la contratación de la central hidroeléctrica de Urrá.

En la denuncia, se señala que tanto Roa como Alcocer habrían ejercido presiones a la junta directiva de Urrá para favorecer a un grupo de empresarios, direccionando la adjudicación de contratos, principalmente el del Parque Solar Urra 19.9,

Igualmente, se habría buscado otorgar a dedo un contrato por un valor de 60 mil millones de pesos.

Frente a estos hechos, la procuradora General, Margarita Cabello Blanco anunció que desde hace varios meses se adelanta una investigación preliminar para establecer una presunta presión para la entrega del mencionado contrato. “A raíz de la información y las quejas que hemos recibido con el tema de Urrá, de unas actuaciones indebidas que se habrían cometido allá tenemos una investigación disciplinaria”, confirmó.

En el caso de Alcocer y de Roa, la jefa del organismo de control disciplinario fue clara en señalar que podrían ser vinculados. “Ahí miraremos lo que considere el delegado si hay lugar o no a incorporar a esa investigación previa las afirmaciones del Ministro para acumularlas con lo que se está investigando”.

En la denuncia presentada por el ministro Bonilla se advierte que existe un claro caso de corrupción en la empresa Urrá S.A, que tiene el control y comercialización de la energía producida por la central hidroeléctrica Urrá 1, la cual está ubicada entre los municipios de Tierralta y Valencia, en el departamento de Córdoba.

Con esta acción, el Ministro de Hacienda amplió la denuncia que había sido radicada el 27 de septiembre de manera anónima y en la que se advertía un posible conflicto de intereses dentro de los procesos de contratación de Urrá S.A. En dicha oportunidad, se señalaban a dos funcionarios de haber “participado presuntamente en procesos licitatorios con pleno conocimiento interno y acceso privilegiado a la información técnica”, favoreciendo así de “manera indebida a las empresas Positive Energy SAS y Ecoenergética Soluciones de Ingeniería SAS”.

En medio de este nuevo caso de corrupción, se conoció que el presidente Gustavo Petro le pidió la renuncia a Ricardo Bonilla como Ministro de Hacienda para que responda ante los señalamientos hechos por su asesora María Alejandra Benavides y que fueron revelados en exclusiva por SEMANA.

“Espero, por tanto, la renuncia de un gran compañero y profesor honesto, el doctor Ricardo Bonilla, secretario de Hacienda de Bogotá Humana, que la dejó en su mejor momento financiero, y gran ministro de Hacienda, que sacó a Colombia de la recesión por el sobreendeudamiento que dejó Duque”, expresó Petro en su cuenta certificada de X.

El Jefe de Estado insistió en que existe una campaña de desprestigio contra sus funcionarios más cercanos: “Buscan el golpe inconstitucional, porque mi deber es ayudar con todo a la gente que trabaja y estudia, y no arrodillarme ante quienes sirven los más poderosos intereses de la codicia y la insensibilidad con los humildes. Espero su renuncia porque ahora debe dedicarse a su defensa sin mancha de usar el poder en su defensa”.

“He terminado este trino largo y mientras tanto han elegido por unanimidad en el CNE a Prada, mi perseguidor: adelantan el golpe de Estado y el pueblo debe prepararse”, concluyó Petro en su publicación que ha generado todo tipo de reacciones.