Masacre del pastor y su familia en Aguachica podría tomar giro impensado: hablan de trampa que le tendieron

Pasan los días y los aguachiquences recuerdan con dolor el asesinato del pastor evangélico Marlon Yamith Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus hijos Ángela Natalia y Santiago.

El pasado 29 de diciembre, mientras en varias zonas de Colombia se alistaban para recibir el fin de año, en Aguachica, el sonar de las balas generaba temor y zozobra. Ese día, cuando el reloj marcaba las 11:13 a. m., dos sicarios llegaron a bordo de una moto hasta un restaurante y uno de los criminales atacó a bala a una familia que se encontraba allí.

En el lugar murieron el pastor Marlon, su esposa Yurlay y su hija Ángela, mientras que el otro integrante de la familia, Santiago, falleció en horas de la madrugada del 1 de enero.

Han pasado pocos días, y mientras las autoridades tratan de dar con los responsables de esta masacre, muchas han sido las versiones y/o hipótesis. Unas, claro está, toman más fuerza que otras.

Entre estas, que todo se trató de una confusión y que a quien, supuestamente, iban a asesinar era a una mujer que ese día también se encontraba en el restaurante en el que departía la familia Lora Rincón.

Entre los pobladores de Aguachica y en las mismas redes sociales, hay quienes mencionan que el sicario se habría equivocado y, en vez de atentar contra Zaida Andrea Sánchez Polanco, alias la Diabla, terminó accionando su arma de fuego contra la hija del pastor, Ángela, y contra su familia.

A propósito, este miércoles 22 de enero, alias la Diabla fue asesinada a bala, mientras se encontraba afuera de un hotel en Medellín, a donde había llegado algunos días antes.

Ahora, cuando el caso del pastor y su familia vuelve a sonar con fuerza tras el asesinato de la Diabla, el reconocido periodista de la Costa Atlántica, Jacobo Solano Cerchiaro, compartió a través de su cuenta en X un hilo que, sin duda, le da un inesperado giro a este caso.

En dicha red social, Solano expuso que la Diabla es la persona que supuestamente habría mandado a asesinar al pastor Lora y a su familia, y que sumado a ello, a esa mujer la estaba buscando el Clan del Golfo.

El periodista también indicó que el líder religioso asesinado sí tenía nexos con Álex González, alias el Calvo, quien fue asesinado en El Banco, Magdalena, el 27 de diciembre de 2024 y quien era pareja sentimental de la Diabla.

“Alexander González, alias el Calvo, era muy amigo del pastor Marlon Lora, desde mucho antes de que se iniciara en el mundo del narcotráfico. Luego fue gran benefactor de la iglesia. El pastor llegó a ganarse la confianza del Calvo, que lo buscaba para orar y que lo escuchara. Según la Diabla, el pastor tenía carros, bienes y algún dinero de su exmarido; información que no se ha precisado porque las autoridades han dejado el caso sin resolver, y porque, según fuentes en Aguachica, la Policía también estaría involucrada”, comentó Solano en X.

En cuanto a la muerte de alias el Calvo, el periodista Solano recordó que él ya había denunciado que su pareja, la Diabla, fue quien estuvo detrás de su crimen.

“En un primer hilo que publiqué en primicia, denuncié a alias la Diabla como la mujer que articuló todo. Era la esposa de Alexander González Pérez, alias el Calvo, un narco que vivía en el conjunto residencial La Arboleda, en la vía que conduce de Aguachica a Gamarra, donde dejaron botados dos carros deportivos, dos cuatrimotos. La Diabla estuvo detenida meses antes por temas de extorsión y narcotráfico; tenía anotaciones por homicidio y hurto calificado, además de haber sido víctima de lesiones por armas de fuego y de injuria y calumnia. Era oriunda del municipio de Gamarra, Cesar, pero fue con el Calvo que logró hacer un gran capital con contactos en el Catatumbo para sacar cocaína”, afirmó el comunicador, textualmente.

Y agregó: “En pocos meses, adquirió el perfil de gran capa de la zona; era una mujer despiadada que no le temblaba la mano para mandar a matar. Portaba una pistola y algunas personas en Gamarra aseguran que portaba dos fusiles. Siempre cambiaba de aspecto; una semana podría estar de pelo rubio y la otra de pelo negro. Usaba pelucas y disfraces”.

El plan de la Diabla contra su pareja, el Calvo

Asegura el periodista Solano que la Diabla se consiguió a un amante y ambos planificaron quitar del camino a el Calvo. Para ello, según el comunicador, esta mujer lo llevó con engaños hasta El Banco, Magdalena, donde —supuestamente— se iba a llevar a cabo un negocio turbio relacionado con la venta de un cargamento de droga.

“El año 2024 fue muy bueno para el Calvo; logró pegarse a varias vueltas y coronar mucho dinero, pero lo que no sabía el Calvo era que estaba durmiendo con el enemigo. La Diabla tenía un amante, ambos le tienden una celada al Calvo y lo llevan con engaños hasta El Banco, Magdalena, donde supuestamente iban a negociar una droga en una finca, pero todo era una trampa. Allá lo estaba esperando el amante con dos sicarios que le pegaron varios tiros y lo arrojaron al río Magdalena”, explicó Solano.

Asesinado el Calvo, narra Solano que alias la Diabla regresó más empoderada a Aguachica para recoger todos los dineros de su pareja y, que no contenta con eso, hasta se quedó con una droga que estaba en una bodega y que pertenecía al grupo criminal del Clan del Golfo.

“La Diabla regresa a Aguachica y comienza a recoger dineros de su exesposo; además, se queda con una droga almacenada en una bodega del Clan del Golfo. Una fuente me precisa que fueron 300 kilos de cocaína”, afirmó.

La supuesta trampa al pastor Lora

La Diabla, cuenta Solano, luego de haberse librado de su pareja el Calvo, llegó hasta Aguachica y, que al parecer, habló con el pastor Lora el 28 de diciembre, un día antes de la masacre.

Narra el periodista que entre la Diabla y el pastor hubo un desacuerdo por un tema económico y esta mujer tomó la decisión de asesinarlo. Por lo tanto, lo que supuestamente hizo fue tenderle una trampa, citándolo el domingo 29 de diciembre a un restaurante, lugar donde finalmente fue acribillado junto a su familia.

“La Diabla, después de que se libra de su marido el 28 de diciembre, llegó a Aguachica a recuperar todo a sangre y fuego. Ese día, al parecer, habló con el pastor Lora, con quien tuvo un desacuerdo por el tema económico. La Diabla tomó la decisión de asesinarlo y lo citó el domingo 29 de diciembre en el restaurante de hamburguesas cercano a la iglesia. Ahí llegaron los sicarios y causaron la masacre que estremeció a Colombia”, dijo Solano en X.

Como su nombre empezó a tomar fuerza en medio de esa masacre, dado que algunos pobladores reconocieron que la Diabla estaba en el lugar, asevera Solano que a ella no le quedó de otra que irse para Barrancabermeja con su hijo de nueve años.

Además de que supuestamente huía, destaca el periodista que su amante la terminó abandonando, los 300 kilos de cocaína también se le perdieron y el Clan del Golfo empezó a buscarla a como diera lugar.

“La Diabla no calculó lo que podría causar este horrendo crimen, y cuando su nombre comenzó a sonar en redes sociales porque algunos testigos la reconocieron en el lugar de los hechos, de inmediato escapó de Aguachica hacia Barrancabermeja con su hijo de nueve años, donde pasó Año Nuevo y donde permaneció por una semana. Sin embargo, su foto seguía circulando por todas partes; su amante también la abandonó, los 300 kilos de cocaína también se perdieron, y es ahí donde el Clan del Golfo decide buscarla por cielo y tierra”, señaló Solano.

El final de la Diabla

El periodista Solano concluye narrando que cansada de la persecución que habían emprendido los integrantes del Clan del Golfo, la Diabla decidió irse a esconder a Medellín, llegando a la capital de Antioquia el 14 de enero.

Sin embargo, no había nada que hacer. Los criminales la ubicaron en el sector de Laureles y la asesinaron el miércoles 22 de enero; afirma el periodista que fueron sicarios a sueldo de la Oficina de Envigado, quienes le propinaron a esta mujer los cinco tiros que acabaron con su vida.

“El 14 de enero, agobiada por las autoridades y por el Clan del Golfo, se traslada por tierra en su camioneta Toyota blanca a Medellín y se esconde en el sector de Laureles. Sin embargo, varias llamadas que hizo desde su celular lograron dar con su paradero, y es ahí donde entra la oficina de Envigado, que le hace la vuelta al clan del Golfo y este miércoles por la noche la asesinan de cinco tiros. Le dispararon en dos ocasiones en el rostro, otras dos en el brazo y una más en el cuello. Malherida, fue trasladada al Hospital San Vicente Fundación de Medellín, donde falleció. Termina la historia de Zaida Andrea Sánchez Polanco, alias La Diabla, que dejó un legado de sangre y muerte”, concluyó Solano a través de su cuenta en X.