Líderes del Catatumbo pasaron la noche en la Plaza de Bolívar, en Bogotá; piden ser escuchados por el Gobierno

Decenas de líderes del Catatumbo, entre ellos adultos mayores y mujeres embarazadas, pasaron la noche en la Plaza de Bolívar, en Bogotá, en protesta por la crisis de orden público que se registra en esta zona del país.

Los líderes sociales, que llegaron el martes a Bogotá, manifestaron que acamparán en el lugar y no se moverán hasta que el gobierno del presidente Gustavo Petro escuche sus reclamos en relación con los hechos de violencia originados por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc.

“Esta es una acción popular y comunitaria con el propósito de solicitar la intervención inmediata del Gobierno nacional. Necesitamos soluciones que beneficien al campesinado y a toda la región del Catatumbo, con el objetivo de transformarla en un territorio de oportunidades y progreso”, dijo Wilmer Torrado, delegado de las juntas urbanas de El Tarra, sobre la protesta.

Asimismo, expresó su esperanza en que el presidente y su gabinete cumplan con los compromisos adquiridos con la región. De igual manera, destacó la necesidad de abordar problemáticas clave como los cultivos ilícitos, el acceso a la salud y la calidad del sistema educativo.

Por su parte, Evelio Blanco Pérez, representante del municipio de Tibú, enfatizó la urgencia de visibilizar las amenazas que enfrenta la población civil.

“Más de 19.000 personas han sido desplazadas del Catatumbo. Esperamos recibir el apoyo prometido en los acuerdos territoriales, incluyendo asistencia y proyectos para quienes desean regresar, así como garantías de seguridad para quienes aún no podemos retornar”, afirmó el líder social.

Toque de queda en Tibú

Por otra parte, en las últimas horas, se conoció que el alcalde de Tibú, Richard Javier Claro Durán, decretó toque de queda con el objetivo de frenar la creciente violencia en el municipio, ubicado en la subregión del Catatumbo, en Norte de Santander.

El decreto firmado por el alcalde establece una serie de medidas restrictivas con el objetivo de proteger a la población civil y minimizar el impacto de los enfrentamientos entre los distintos actores armados que operan en la región.

Estas disposiciones, vigentes hasta el 2 de febrero, incluyen la restricción de circulación de vehículos que transporten cilindros de gas, sustancias peligrosas o tóxicas durante el horario nocturno, de 8 p. m. a 5:59 a. m.

Asimismo, el alcalde prohibió el tránsito de motocicletas con parrillero en el mismo horario, con el fin de prevenir posibles atentados o hechos violentos vinculados al uso de estos vehículos por parte de grupos armados ilegales.