Nación
La historia del expolicía que montó su propio puesto de control para pedir sobornos
Dos personas fueron capturadas y tenían montado un puesto de control para exigir dinero a infractores.

Hasta los puestos de control que hace la Policía tienen un decálogo. Cuántos uniformados presentes, los conos, los señaladores, todo lo necesario para que los conductores sepan que están siendo requeridos por la autoridad y no por un grupo criminal; sin embargo, ahora resulta muy complejo diferenciarlos, más cuando sus anfitriones han hecho parte de la Policía.
Esa línea difusa entre un puesto de control y un retén la están aprovechando los delincuentes con habilidades histriónicas, con la capacidad de disfrazarse y convertirse por varios minutos en policías, armados y con la autoridad para requerir ciudadanos, hacerles recomendaciones y amenazarlos con infracciones o inmovilizaciones.
Un expolicía montó su propio emprendimiento criminal y armaba puestos de control por toda Bogotá cobrando sobornos a infractores. Fue capturado por la misma Policía. https://t.co/if1kX8q65f pic.twitter.com/qUOGZvPUwY
— Revista Semana (@RevistaSemana) March 13, 2025
La experiencia de un expolicía se sumó al emprendimiento criminal de montar su propio puesto de control, seguramente algo que tenía en la memoria de cuando portada el uniforme, pero que en esta oportunidad estaba destinado únicamente a cobrar extorsiones o sobornos para quienes creían que estaban frente a un funcionario público honrado. El objetivo, claramente, era extorsionar a los conductores.
A la estación de Policía de la localidad de Suba, en el noroccidente de Bogotá, llegó una información que advertía que un puesto de control de la institución parecía más un peaje extorsivo: el que pasaba por este tenía que pagar por incurrir, supuestamente, en alguna infracción.
Lo más leído
“En las últimas horas, uniformados adscritos a la Estación de Policía Suba lograron la captura de dos personas por los delitos de porte ilegal de armas de fuego y utilización ilegal de uniformes e insignias”, advirtió la Policía Metropolitana de Bogotá tras recibir la información de los falsos policías.
Una patrulla de la Policía, la verdadera, llegó a verificar la situación y, ante su presencia, los actores —vestidos y en otra moto— huyeron del lugar. Fue necesario advertir al resto de patrullas y ordenar un plan candado que permitiera la captura de los falsos uniformados con armas de fuego y con todo el vestuario.
“Estos hechos se presentaron en el barrio San José de Bavaria, mientras las zonas de atención adelantaban labores de patrullaje, observan a dos personas realizando un puesto de control, que al notar la presencia de los uniformados huyen en una motocicleta”, advirtió la Policía en un comunicado.
Pero no eran simples actores con la capacidad de simular o disfrazarse de policías. Ante la presencia de los uniformados, utilizaron las armas de fuego, que no eran falsas, y atentaron contra la vida de los policías. La autoridad respondió y la actuación no incluyó la experiencia que sí tenían los policías reales.
“Estos delincuentes hacen uso de armas de fuego y atentan contra la integridad de los policiales, por lo cual se presenta un intercambio de disparos y, después de unos minutos, se logró la captura de estas dos personas. Asimismo, es de resaltar que uno de estos capturados llevaba puesto un uniforme de uso exclusivo de la Policía Nacional; también se les halla en su poder un arma de fuego tipo pistola y munición para la misma”, señaló la Policía.
En las labores de verificación, tras la captura de los dos falsos policías, los investigadores lograron determinar que uno de los capturados perteneció a la institución en el año 2024. Era el encargado de suplir los uniformes para los retenes que montaban en diferentes puntos de Bogotá.
“De igual manera, el arma de fuego incautada habría sido utilizada en el homicidio de un uniformado de la Policía Nacional en el año 2022”, explicó la Policía.