La defensa de Nicolás Petro le metió reversa a una particular solicitud a la justicia. ¿Qué pasó?

Mientras se acortan los tiempos y espacios para que Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, se siente en un juicio por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, su defensa hizo una movida interesante, que días después echó para atrás.

Hace más de un año, cuando Nicolás Petro aceptó los delitos que fueron imputados y prometió contar la verdad, un juez de control de garantías ordenó una medida de aseguramiento en su contra, una que lo convirtió en reo de la ciudad de Barranquilla. El juez le prohibió salir de la capital del Atlántico, la arenosa por cárcel.

A vísperas del precarnaval, la defensa del hijo del presidente, se lanzó con una solicitud a la justicia para quitarle el grillete simbólico a su cliente. Permitir su movilidad en el resto del país, incluso en el exterior. El argumento principal está en las muestras de cumplimiento a las disposiciones de la justicia, las citas y los requerimientos de los jueces.

Otro argumento está en los temas de seguridad. Reducir la movilidad de Nicolás Petro a la ciudad de Barranquilla, donde todos conocen su lugar de residencia y cualquier recorrido se convierte en acontecimiento exótico, es al mismo tiempo un escenario de riesgo. De ahí la necesidad de revocar la medida de aseguramiento, la petición principal de la defensa.

La solicitud ya tenía agenda en la justicia. Este miércoles se supone que se encontrarían ante un juez de Soledad en el Atlántico, para discutir la posibilidad de revocar esa medida de aseguramiento con los argumentos consignados en la misma solicitud. Sin embargo, la solicitud fue retirada por la misma defensa.

La audiencia de revocatoria de la medida de aseguramiento se suspendió y así la posibilidad de abrir la “puerta de oro” para que el hijo del presidente, Gustavo Petro, recorriera el país sin las restricciones de un procesado judicial. Las causas, meramente técnicas.

Desde algunos sectores advertían que la solicitud de la defensa, radicada en un juzgado distinto a la ciudad de Barranquilla, era una estrategia para lograr en un municipio, lo que en la ciudad seguramente sería rechazado. La realidad jurídica escribe una conclusión diferente, más apegada al debido proceso.

Nicolás Petro está en un proceso que sigue en las audiencias preparatorias donde la Fiscalía hace una eterna lectura de las pruebas, del mundo de evidencias, para demostrar que el hijo del presidente cometió los dos delitos imputados por el ente acusador.

“Que obtuvo durante el período del año 2018 al 2023, que fue el periodo investigado en esta información de la Dian. Se podrá establecer y se podrá probar por la Fiscalía General de la Nación que hubo información exógena, relacionada de terceros, que permiten demostrar que sí hubo un incremento patrimonial injustificado por parte del señor Nicolás Fernando Petro Burgos y su núcleo familiar más cercano”, advirtió la Fiscalía en la audiencia.

La defensa de Nicolás Petro completó la exposición de las evidencias y sin confirmarlo, anticiparon que están listos para enfrentarse a la Fiscalía en un escenario de juicio y con la confianza de derrotar la hipótesis de la Fiscalía sobre la ilegalidad de los Dineros que terminaron en el closet del hijo del presidente.